guerra del opio
Páginas: 3 (502 palabras)
Publicado: 31 de julio de 2013
Las guerras del opio
Julián Andrade
Estamos librando nuestra propia guerra del opio. El Informe Mundial sobre las Drogas 2013 reveló que México es el principal productor de opio y heroína enAmérica Latina, superando inclusive a Colombia.
Por supuesto que no son buenas noticias y dan cuenta de la desatención que existió en los programas de erradicación de cultivos ilícitos, alconcentrar los esfuerzos en el combate directo a los grupos del crimen organizado.
Durante años la estrategia del gobierno mexicano estuvo centrada en la destrucción de plantíos, porque se creía que era laforma indicada de pegar en la estructura del negocio de las drogas. Esto fue cambiando a lo largo de los años, hasta que los esfuerzos se centraron en otros ángulos del problema y con lasconsecuencias que ya conocemos.
Los programas de erradicación tampoco fueron la panacea y significaron un grave problema en materia de derechos humanos y de detenciones de campesinos que colaboraban con losnarcotraficantes, porque éstos les ofrecían mejores condiciones de ingreso. En los años setenta la Operación Cóndor fue un verdadero desastre. Muchas injusticias se generaron con esta situación.
Unade las regiones de siembra de amapola, que es de donde se obtiene la goma de opio, es el estado de Guerrero.
Esto no es nuevo pero explica, de algún modo, el nivel de violencia en las regiones deproducción, donde la situación social, en la que se combinan la marginación y la debilidad institucional, complica la acción de las autoridades. En el pasado ya ocurrió que enfrentamientos en teoríapor la defensa de la ecología tenían que ver más bien con la disputa de predios y tierras para sembrar amapola.
Muchas comunidades están a un lado o al otro de la frontera legal ante contextos enlos que no caben los análisis maniqueos, donde no hay blanco ni negro, sino una amplia tonalidad de grises.
Los episodios de violencia en los límites de Michoacán con Guerrero, tienen que ver...
Julián Andrade
Estamos librando nuestra propia guerra del opio. El Informe Mundial sobre las Drogas 2013 reveló que México es el principal productor de opio y heroína enAmérica Latina, superando inclusive a Colombia.
Por supuesto que no son buenas noticias y dan cuenta de la desatención que existió en los programas de erradicación de cultivos ilícitos, alconcentrar los esfuerzos en el combate directo a los grupos del crimen organizado.
Durante años la estrategia del gobierno mexicano estuvo centrada en la destrucción de plantíos, porque se creía que era laforma indicada de pegar en la estructura del negocio de las drogas. Esto fue cambiando a lo largo de los años, hasta que los esfuerzos se centraron en otros ángulos del problema y con lasconsecuencias que ya conocemos.
Los programas de erradicación tampoco fueron la panacea y significaron un grave problema en materia de derechos humanos y de detenciones de campesinos que colaboraban con losnarcotraficantes, porque éstos les ofrecían mejores condiciones de ingreso. En los años setenta la Operación Cóndor fue un verdadero desastre. Muchas injusticias se generaron con esta situación.
Unade las regiones de siembra de amapola, que es de donde se obtiene la goma de opio, es el estado de Guerrero.
Esto no es nuevo pero explica, de algún modo, el nivel de violencia en las regiones deproducción, donde la situación social, en la que se combinan la marginación y la debilidad institucional, complica la acción de las autoridades. En el pasado ya ocurrió que enfrentamientos en teoríapor la defensa de la ecología tenían que ver más bien con la disputa de predios y tierras para sembrar amapola.
Muchas comunidades están a un lado o al otro de la frontera legal ante contextos enlos que no caben los análisis maniqueos, donde no hay blanco ni negro, sino una amplia tonalidad de grises.
Los episodios de violencia en los límites de Michoacán con Guerrero, tienen que ver...
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