Historias De Vereda
“Nunca consideres el estudio como una obligación, sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber”.
Albert Einstein.
Por aquellasinequívocas casualidades de la vida, estoy en esta pequeña ciudad empotrada en las montañas de Colombia, recorriendo sus caminos lluviosos y empedrados, enfrentando el gran deseo de compartir procesos,ejerciendo la docencia.
La docencia, una vocación que nos libera de miedos, que fortalece nuestro desarrollo intelectual, que nos permite entregar cada día lo mejor, a quienes son nuestros principalesactores: los estudiantes. Los estudiantes, los mismos que desde el primer día me miran con ojos de ratones vivarachos, inquietos y escudriñantes. Los mismos a quienes yo también miro con ansiedad;son tan diferentes: juiciosos, callados, respetuosos, algunos inquietos y necios, nada parecido a lo que yo, alguna vez, estuve acostumbrada…
Es aquí donde por primera vez puedo cristalizar missueños. Sueños que veo convertidos en realidad...tengo todo en las manos: una juventud ansiosa y libre de barbarie, un paisaje exquisito y un canto celestial de ranas, pájaros, vacas y quebradas.
Elsalón de clases es el teatro perfecto para que yo represente con risas, muecas, brincos y saltos cada uno de los hitos de la literatura en los distintos grados académicos, hitos que mezclo consinónimos, antónimos, homónimos, parónimos, oraciones simples, oraciones compuestas, verbos y cuanta categoría gramatical quiere entrar en escena…
Me siguen con sus miradas, con sus sonrisas, y finalmente,con sus valiosos aportes. He logrado mi propósito: compartir el dulce sabor de la literatura, hacer que los educandos me escuchen, participen y se apropien de cada uno de los temas como un todo ensus vidas. Hoy, he convertido ese maravilloso paisaje natural en la musa que los inspira para contar sus vivencias de campo.
Cada vez que termina la parte teórica de una clase salimos a la...
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