Imperio romano

El Imperio romano



La conquista de Italia: anexión y pacto

El progresivo sometimiento de los distintos pueblos itálicos, el dominio y
hegemonía alcanzado en el Mediterráneo occidental como consecuencia de las
Guerras Púnicas y la conquista del Mediterráneo oriental constituyen tres
hechos fundamentales a la hora de comprender la evolución histórica de la
ciudad del Tíber y eldesarrollo y formación del imperialismo romano, al que
definimos en tomo a dos coordenadas: el «gobierno del mundo» y la
«explotación del mundo».
El primer eslabón de esta cadena viene dado, como apuntábamos, por la
conquista y organización de los distintos pueblos itálicos, campo de
experiencia para la posterior organización de todo el Mediterráneo en los dos
aspectos anteriormentereseñados. En lo que al «gobierno del mundo» respecta,
la conquista de Italia iba a dar lugar a una federación de tribus y polis
autónomas, sometidas a la hegemonía romana, en cuya formación Roma aplicaba
dos sistemas distintos pero complementarios. De un lado, la anexión, mediante
la cual se ampliaba geográfica y demográficamente la polis de Roma;
geográficamente, en cuanto que el territorioanexionado pasaba a formar parte
del Estado; demográficamente, debido a que sus habitantes pasaban en parte a
integrarse dentro de la comunidad de los ciudadanos, teniendo el resto
algunas diferencias cualitativas en cuanto a su status. Por el otro lado, los
pueblos y polis restantes iban a estar ligados a la ciudad del Tíber mediante
un pacto (foedus), que reflejaba las relacionesentre las dos partes, pero
que tenía como común denominador el poner de manifiesto una situación de
desigualdad en relación con sus habitantes, que no gozaban de la ciudadanía
romana ni de los derechos políticos y económicos, especialmente en lo
relativo a la propiedad, inherentes a la misma.
Se trataba de una Federación, como apuntábamos, hegemonizada por Roma, que
obtenía en virtud deello determinados beneficios que constituían, pese al
escaso desarrollo del «imperialismo económico» durante esta época, los
primeros síntomas de la «explotación del mundo» que se desarrollaría con
posterioridad. Roma exigía hombres a los territorios anexionados y federados,
hecho que permitía que esta última se convirtiera en la potencia militar más
sólida de la cuenca mediterránea; pero,también, requería dinero de los
mismos, y ello de forma no homogénea y en consecuencia con el status jurídico
de cada pueblo o polis; de esta forma, mientras que los ciudadanos romanos,
cualquiera que fuera su categoría, estaban obligados a contribuir al erario
romano mediante el pago de un tributum que gravaba, con carácter no
periódico, tanto el capital territorial como el mobiliariode los mismos, los
no ciudadanos se veían obligados, en ausencia del impuesto anterior y al
margen de las contribuciones que debían hacer a su propia ciudad, a
satisfacer impuestos bajo una doble forma: en efectivo, por el usufructo de
determinados territorios que habían pertenecido a la ciudad con anterioridad
a la federación y que habían pasado a engrosar el ager publicus, propiedaddel Senado y del pueblo romano; en forma de prestaciones, que permitieran
satisfacer los gastos que requería la administración romana de dichos
territorios.
Si el sometimiento de Italia constituyó la escuela del imperialismo romano,
éste se iba a gestar con caracteres propios y definitivos en los conflictos
de las guerras púnicas y en la conquista del Mediterráneo oriental.

Lasprovincias

En efecto, tras la Primera Guerra Púnica y por el tratado del 241 a.C.,
Cartago se vio obligada a ceder a Roma sus posesiones en Sicilia y, también
como secuela de la misma, Roma consiguió la conquista de Córcega y Cerdeña.
En estos territorios recién conquistados, Roma iba a implantar su política de
anexión, pero bajo un prisma nuevo que se materializaría en la organización...