informe napoleon

Escuela: E.S.S N°3
Materia: Historia
Profesora: María Inés San Martín
Tema: “Imperio de Napoleón”
Alumnos:-Gómez Galli Martina
-Medina Valentina
-Palladino Sofía
Curso: 3° 7°
Año: 2015





Consignas:
1- Huida de Luis XVI. Consecuencias
2- Etapas de laRepublica:
a) Del “terror”.
b) Directorio.
c) Consulado.
d) Imperio.
3- Imperio de Napoleón: Elección de Napoleón como Emperador.
a) Rivalidad con Inglaterra. Bloqueos
b) Campaña a Portugal
c) Invasión a España
d) Campaña a Rusia
4- Batalla de las naciones (Leipzig) “Los 100 días”
5- Derrota definitiva de Napoleón (Waterloo)









1- Huida de Luis XVI:
Durante el siglo XVIII, Franciareunía todas las características y contradicciones del absolutismo monárquico. El reino, gravemente endeudado por las guerras de Luis XV (1715-1774), ofrecía escandalosas desigualdades sociales. Mientras la nobleza (Primer Estado) y el clero (Segundo Estado) estaban libres de cargas fiscales y gozaban de todo tipo de privilegios, el pago de los tributos recaía sobre la burguesía y los campesinos(Tercer Estado), cuya representación política, además, no se correspondía con su peso real en la economía productiva. Por ello, cuando el soberano se vio obligado a subir los impuestos, el clamor del Tercer Estado arreció más que nunca. Era preciso, pues, introducir reformas si el sistema no quería verse abocado al colapso.
Los primeros intentos correctores partieron del propio Luis XVI, quien nada mássubir al trono en 1774, puso frente del gobierno a hombres de demostrada capacidad administrativa. Sin embargo, las propuestas de un reparto mas equitativos de las cargas fiscales formuladas por sus ministros -Jacques Turgot (1774-1777), Jacques Necker (1777-1781, 1788-1789 y 1789-1790), Charles Alexandre de Calonne (1783-1787) y Loménie de Brienne (1783-1787)- tropezaron con la intransigencia dela aristocracia, incapaz de abandonar sus privilegios a pesar de la quiebra del reino tras el apoyo prestado a los independentistas norteamericanos.
Finalmente, en 1788, ante el callejón sin salida en que se encontraba el país, el rey convocó a los Estados Generales, única institución representativa cuyas resoluciones sobre impuestos eran vinculantes para la primavera del año siguiente. Laconvocatoria, la primera en 175 años, recibió la adhesión unánime del pueblo y puso en marcha un proceso sin vuelta atrás.
Más que abordar la dramática coyuntura económica, los participantes querían aprovechar el conclave para dar un vuelco radical a la situación política, jurídica y social de Francia. La nobleza pretendía restablecer su posición anterior al absolutismo; los campesinos aspiraban amejorar su precaria situación; y los burgueses, la clase social en ascenso, veían la oportunidad de hacer valer su concepción de la libertad y la igualdad.
La publicación de un panfleto del abate Sieyés - ¿Qué es el Tercer Estado? – y las medidas del gobierno de Luis XVI destinadas a impedir la sistemática obstrucción de la nobleza a sus reformas dieron un inusitado protagonismo a los sectorespopulares, inquietos por el desempleo y la escasez de alimentos, fruto de malas cosechas.
Las primeras sesiones pusieron pronto de manifiesto las insalvables diferencias entre los principios democráticos y los clasistas. Los dos estados superiores insistieron en reunirse por separado y votar mientras que el Tercer Estados defendía la reunión conjunta y la votación por cabezas. Tras varias semanas dediscusión, el 17 de junio, el Tercer Estado convocó su propio cónclave, la Asamblea Nacional. Cuando, el 20 de junio, los diputados encontraron cerrada su sala de sesiones por orden real, prosiguieron sus reuniones en un local próximo destinado en un local próximo destinado al juego de pelota, donde juraron no separarse hasta que Francia tuviera una nueva constitución. Numerosos miembros del bajo...