Ivaan

* hghhhjhyjuLe he dicho que se vaya de casa.
Fue tal la algarabía y trapatiesta que el borracho formó que los vecinos acudieron alarmados. La luz incierta de la tarde aislaba la sombra de Autorita, escondida tras un sillón, con los ojos cerrados y las manos puestas en los oídos para no oír, para no ver, para no sentir de nuevo el miedo.
-¡Quiero a mi hijita! ¡la quiero! -gritaba el borrachomientras golpeaba el suelo con el cinto.
No tardaron en personarse las autoridades policiales, que comprobaron que era cierto la que tantas veces doña Lapita les había contado en comisaría. Al cabo de dos meses se dictaminó que la niña se quedara bajo la guardia y tutela de la maestra.
La niña Aurorita le fue devolviendo el color a sus dibujos.
La niña Aurorita aprendió a abrazar.
La niñaAurorita aprendió a reír.
-Le he dicho que se vaya de casa.
Fue tal la algarabía y trapatiesta que el borracho formó que los vecinos acudieron alarmados. La luz incierta de la tarde aislaba la sombra de Aurorita, escondida tras un sillón, con los ojos cerrados y las manos puestas en los oídos para no oír, para no ver, para no sentir de nuevo el miedo.
-¡Quiero a mi hijita! ¡la quiero! -gritaba elborracho mientras golpeaba el suelo con el cinto.
No tardaron en personarse las autoridades policiales, que comprobaron que era cierto la que tantas veces doña Lupita les había contado en comisaría. Al cabo de dos meses se dictaminó que la niña se quedara bajo la guardia y tutela de la maestra.
La niña Aurorita le fue devolviendo el color a sus dibujos.
para que le regresaran a su hija a señor, sesometió a un año de revisionista .
cuando salio ya estaba motivado a recuperar a su hija y tratarla con respeto y paciencia.
aurorita vonvio con su papa. su papa busco trabajo y le pudo dar lujos a aurorita los que se meresia.
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18:35
Ivan Avalos Calderon
Le he dicho que se vaya de casa.
Fue tal la algarabía y trapatiesta que el borracho formó que los vecinos acudieron alarmados. La luzincierta de la tarde aislaba la sombra de Aurorita, escondida tras un sillón, con los ojos cerrados y las manos puestas en los oídos para no oír, para no ver, para no sentir de nuevo el miedo.
-¡Quiero a mi hijita! ¡la quiero! -gritaba el borracho mientras golpeaba el suelo con el cinto.
No tardaron en personarse las autoridades policiales, que comprobaron que era cierto la que tantas vecesdoña Lupita les había contado en comisaría. Al cabo de dos meses se dictaminó que la niña se quedara bajo la guardia y tutela de la maestra.
La niña Aurorita le fue devolviendo el color a sus dibujos.
La niña Aurorita aprendió a abrazar.
La niña Aurorita aprendió a reír.
-Le he dicho que se vaya de casa.
Fue tal la algarabía y trapatiesta que el borracho formó que los vecinos acudieron alarmados.La luz incierta de la tarde aislaba la sombra de Aurorita, escondida tras un sillón, con los ojos cerrados y las manos puestas en los oídos para no oír, para no ver, para no sentir de nuevo el miedo.
-¡Quiero a mi hijita! ¡la quiero! -gritaba el borracho mientras golpeaba el suelo con el cinto.
No tardaron en personarse las autoridades policiales, que comprobaron que era cierto la que tantasveces doña Lupita les había contado en comisaría. Al cabo de dos meses se dictaminó que la niña se quedara bajo la guardia y tutela de la maestra.
La niña Aurorita le fue devolviendo el color a sus dibujos.
para que le regresaran a su hija a señor, se sometió a un año de revisionista .
cuando salio ya estaba motivado a recuperar a su hija y tratarla con respeto y paciencia.
Aurorita volvió consu papa. su papa busco trabajo y le pudo dar lujos a Aurorita los que se merecía.
* Le he dicho que se vaya de casa.
Fue tal la algarabía y trapatiesta que el borracho formó que los vecinos acudieron alarmados. La luz incierta de la tarde aislaba la sombra de Autorita, escondida tras un sillón, con los ojos cerrados y las manos puestas en los oídos para no oír, para no ver, para no sentir...