Jesucristo, Rey de la Historia
Jesucristo:
Rey
de
la
Historia
Fundamentación
personal
desde
la
Fe
Católica
Rodrigo
Pusso
Pontificia
Universidad
Católica
Argentina
Historia
de
la
Cultura
1er
año -‐
Turno
Tarde
-‐
Comisión
“M”
¿Quién
es
Jesucristo?
“Vosotros
me
llamáis
‘el
Maestro’
y
‘el
Señor’
y
decís
bien,
porque
lo
soy”
(Jn
13,
13).
Juan
relata
el
dicho
del
mismo
Jesús
que
nos
da
una
idea
de
quién
es y
a
qué
vino.
Jesús
es
“Hijo
Único
de
Dios,
nacido
del
Padre
antes
de
todos
los
siglos;
Dios
de
Dios,
luz
de
luz,
Dios
Verdadero
de
Dios
Verdadero
[…]
que
por
[…]
nuestra
salvación,
bajo
del
cielo
[…]
y
su
reino no
tendrá
fin.”1
Más
allá
de
toda
consideración
salvífica,
Cristo
es
Mejor
Hombre
y
Mejor
Amigo.
Personaje
fundamental
de
la
Historia,
Jesús
es
Rey
eterno
de
toda
la
humanidad,
y
no
se
cansa
de
anunciar
a
nuestro
Padre
Celestial:
“Quien
me
ha
visto
a
mí,
ha
visto
al
Padre”
2
¿Por
qué
tenemos
un
Padre
en
lo
Alto?
Jesús
responde
al
deseo
más
hondo
que
el
ser
humano
tiene
de
un
Padre
Misericordioso
en
la
parábola
del
hijo pródigo;
“Es
justo
que
haya
fiesta
y
alegría,
porque
tu
hermano
estaba
muerto
y
ha
vuelto
a
la
vida,
estaba
perdido
y
ha
sido
encontrado”3.
Parábolas
Recién
mencionaba
que
Jesús
“responde
en
la
parábola”. Conocemos
sus
enseñanzas
y
la
Revelación
de
Dios
mediante
La
Sagrada
Biblia:
(grieg.
biblos
=
rollo
de
escritura,
libro)
así
designan
los
judíos
y
los
cristianos
a
una
colección
de
escritos
sagrados
surgida
en
un
periodo de
mas
de
mil
años,
y
que
es
para
ambos
el
documento
originario
de
su
fe.
La
Biblia
cristiana
es
mucho
más
amplia
que
la
judía
porque
además
de
los
escritos
de
esta,
contiene
los
cuatro
evangelios,
las
cartas
de san
Pablo
y
otros
escritos
de
la
primera
Iglesia.
4
Jesucristo
enseñaba
por
medio
de
parábolas.
Cuando
sus
apóstoles
le
preguntaron
por
que
usaba
este
medio,
Él
les
dijo
“A
ustedes
se
les
ha
concedido
conocer
los
misterios
de
Dios;
a
los
demás,
en
cambio,
se
les
habla
en
parábolas,
para
que
miren
sin
ver
y
oigan
sin
comprender.”
5
Las
parábolas
son
apologías
a
través
de
las
cuales
Cristo
quiere
que
comprendamos
el
Reino...
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