Jorge eliecer gaitan
La importancia del viernes 9 de abril también se puede apreciar en otros aspectos. La muerte de Gaitán provocó verdaderas insurrecciones populares en diferentes lugares del país (las llamadas "juntas revolucionarias" se tomaron el poder en diferentes localidades y subvirtieron momentáneamente el orden). Por otra parte, a partir de esa fecha, la violencia,que ya venía manifestándose con una gran intensidad desde tiempo atrás, adquirió un ritmo particularmente escalofriante. El distanciamiento entre el bipartidismo se acentuó, haciendo cada vez más difícil establecer gobiernos de coalición. Además, el Ejército, que hasta entonces había conservado una cierta neutralidad en medio de todos los conflictos, empezó a identificarse con el gobierno. Pero loque nos interesa en este artículo es destacar otro aspecto, quizá menos conocido por el público en general a pesar de que guarda, a nuestro parecer, una gran importancia. Se trata de la interpretación que hicieron del 9 de abril tanto el gobierno de Mariano Ospina Pérez (1946-1950), como las élites en general. Ese tipo de lectura de lo sucedido aquel fatídico viernes justificó -y siguejustificando hoy en día- la respuesta violenta por parte de todos aquellos que vieron en la irrupción de los marginados políticos y sociales una amenaza para el "orden" establecido. En ese sentido, lo sucedido el 9 de abril de 1948 fue aprovechado por la clase dirigente para darle una determinada interpretación ideológica a partir de la cual se pudieran deslegitimar las reivindicaciones de los sectoresexcluidos, estrategia que sería -el tiempo se ha encargado de demostrarlo- de una gran eficacia para acallar todo brote de oposición. Es decir que en el mismo momento en que las masas populares creían adquirir su independencia como actores sociales -¿acaso no salieron, por su propia cuenta, a vengar la muerte del "líder" social, atacando y destruyendo todos los símbolos que representaban el poder?-,lo que en realidad se estaba presenciando era su desmantelamiento como actores autónomos. Hoy en día, cincuenta años después, no se vislumbra aún, en el escenario político colombiano, un movimiento o partido de oposición que ofrezca una alternativa sólida, creíble y legítima frente al bipartidismo tradicional.
La interpretación que la mayoría de los sectores de la clase dirigente hizo del 9 deabril está basada en una lectura sesgada de los acontecimientos. Antes del asesinato de Gaitán, el país ya estaba inmerso en una profunda violencia en la que se mezclaban todo tipo de causas. Las 14.000 muertes violentas correspondientes a 1947 demuestran claramente que la violencia no comenzó el 9 de abril 3 ; los años 30, cuando los liberales retomaron el poder después de una abstinencia de...
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