Justo
En las décadas siguientes, los españoles organizaron operaciones derescate y lograron recuperar grandes cantidades de oro y plata del Margarita. En cambio, nunca encontraron el Nuestra Señora de Atocha, aunque sabían que estaba hundido cerca del Margaritay contaban con el testimonio de sus cinco únicos supervivientes. Con los años, aquella flota del tesoro se perdió en el olvido.
El barco perdido
A finales de la década de 1960, elcaliforniano Mel Fisher, instructor de buceo, dio con la pista de los navíos españoles gracias a documentos del Archivo de Indias, en Sevilla. Fisher había participado en la exploraciónde otra flota española hundida en 1715 por un huracán en los cayos de Florida, cuyos restos había localizado Kip Wagner en 1959. El Atocha era un objetivo igual de apetecible y Fisherdecidió lanzarse en su busca. Creó una empresa de rescate de pecios, llamada Treasure Salvors, e implicó en la aventura a toda su familia, además de a un buen puñado de buzos einversores. Se procuró asimismo tecnología de exploración puntera en la época: un magnetómetro de protones y un sistema de posicionamiento Loran, precursor del actual GPS.
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