Kant

La cultura y el desarrollo económica
En 1905, el sociólogo alemán Max Weber publicó su célebre obra intitulada “La ética protestante y el espíritu capitalista”, con la cual se abrió un debate sobre el papel de la cultura en el desarrollo económico. De acuerdo con la tesis de Weber, aquellas sociedades occidentales que profesaban el protestantismo (en particular la moral calvinista) manteníanciertos valores socio-culturales que les permitía integrarse de mejor manera al sistema económico del capitalismo. Con este estudio sin paralelo, el autor alemán sentó la base para una nueva área del estudio de la economía que ahora buscaba entender cómo las concepciones propias de diferentes culturas, sus tradiciones, creencias y valores podían predeterminar su éxito en términos de desarrolloeconómico.
Sin embargo, uno de los principales elementos de la tesis weberiana es su carácter determinista. En otras palabras, para Weber los valores religiosos y culturales jugaban un rol central en el desarrollo económico, y caía en el error metodológico de obviar otras variables asociadas como lo son las instituciones, el sistema jurídico-político, las prácticas económicas, etc. Y pecando del mismoerror, muchos intelectuales dieron por hecho de que la riqueza y la pobreza podían ser un reflejo claro de determinados valores sociales, y que por tal razón, existían grupos culturales que estaban ‘predeterminados’ a vivir en la riqueza o en la pobreza.
En respuesta a todo esto, muchos autores se han dado a la tarea de explorar este vector de la ciencia económica, intentando descubrir unposible nexo entre el desarrollo y la cultura. En esta línea de ideas, los economistas Douglas North y Svetozar Pejovich han intentado encontrar cierta relación entre el éxito económico y la cultura sin caer en el determinismo weberiano. En el caso de North (2000, p. 52), su tesis parte de la idea de que existen tanto instituciones informales –valores culturales y prácticas sociales tradicionales- comoinstituciones formales –tales como derechos de propiedad privada, libertad de contratación, un sistema judicial eficiente e independiente así como una constitución- que juegan un papel importante en la promoción del desarrollo. Y que es en base a la existencia de dichas instituciones que los individuos determinan los costos de producción y de transacción, y la rentabilidad o no-rentabilidad de laacción económica.
Pero es la aplicación de parte de Pejovich de las ideas de North la que pareciera tener un mayor impacto en el tema en cuestión. En base a esta idea de dos tipos de instituciones, Pejovich desarrolló la Teoría de la Interacción, según la cual, cuando las normas formales están en armonía con las normas informales de una determinada cultura, los incentivos tienden a reducir loscostos de transacción y liberar recursos para la producción de riqueza (2001, p. 2). Por ello, el autor llega a creer que para que el desarrollo sea posible se requiere –hasta cierto punto y en ciertos casos- de reestructuraciones institucionales y una reconstrucción de la interacción entre instituciones formales e informales (Pejovich, 2001, p. 9).
Si bien la idea de Pejovich se separacompletamente del determinismo cultural propugnado por Weber, es evidente que para el autor existen ciertas culturas que son más proclives que otras a favorecer instituciones de mercado: aquellas que tienen una mayor capacidad de adaptación. Y si a esto se le suma que la base de su concepción es la idea de que ciertas instituciones formales predeterminadas (aquellas propias del capitalismo) deben ejercerinfluencia sobre las informales para generar desarrollo, es evidente que el autor cae un tanto en cierta ‘arrogancia occidental’ al estudiar el fenómeno. Se dice esto ya que pareciera que Pejovich busca que se armonice exclusivamente la cultura con la institucionalidad capitalista para hacer que ésta última se desarrolle exitosamente, dejando de lado la posibilidad de que sea el mismo capitalismo...