La Autoridad Pedagogica

En busca de la Autoridad Pedagógica en la Escuela Moderna


¿De qué hablamos cuando nos referimos a la crisis en la educación?
Si bien la autora, Hanna Arendt, describe una situación de crisis educativa en los Estados Unidos, considero que tiene una gran similitud con los fenómenos que se dan actualmente dentro de los centros educativos de nuestro país. Es por este motivo que escogíresumir esta postura para poder luego compararla con mi experiencia personal como Docente.
Claramente se presentan ante nosotros los diferentes indicadores de la crisis que afrontamos en educación, a través de los indicadores de repetición y deserción oficiales, y mucho más cualitativamente a través de lo que la autora denomina como “la desaparición del sentido común”[1]
El sentidocomún constituye la base moral de la sociedad, por la cual podemos convivir y alcanzar ciertos acuerdos. La crisis en este aspecto se vuelve materia principal de lo político, ya que amenaza la existencia de la nación.
Varios han sido los motivos por los cuales se llaga a este punto, sin lugar a duda los avances en las investigaciones sobre psicología aplicados al campo de la pedagogía han sidomuchas veces los responsables de la disminución paulatina de la calidad educativa que nos lleva a la realidad actual. En especial en aquellos países en los cuales estas teorías han sido aceptadas sin mediar la reflexión crítica y profesional.
Otra cuestión central del pensamiento político de Norteamérica, compartido en gran parte por nuestro país, es el concepto de igualdad. Que postula nosolamente el acceso de toda la población a la educación, sino también la intención de igualar y borrar todas las diferencias entre jóvenes y viejos, docentes y alumnos, etc. Para lograr este objetivo el primer paso será la pérdida de autoridad por parte del docente, quien pasa a estar en una posición totalmente horizontal con el alumno.
Un alumno por otro lado que posee su propio mundo, eldel niño o del adolescente, en el cual queda aislado del mundo adulto y posee plena libertad de acción. Los adultos cumplen un papel de ayuda en este proceso de aprendizaje que los niños deberán experimentar dentro de su grupo de pares. Este nuevo orden genera en los niños un sentimiento de coacción que es ejercido por el propio grupo, imposibilitando su emancipación y generando conductas deconformismo o delincuencia juvenil
Por otro lado la pedagogía se desarrollo como una ciencia de la enseñanza, generando el supuesto de que un maestro puede enseñar cualquier asignatura si posee los conocimientos pedagógicos adecuados. Como consecuencia en la formación docente se ha perdido la relevancia de las asignaturas específicas. De esta forma los docentes pierden la autoridad quehistóricamente le confería la posesión de un saber superior al de sus alumnos. Hoy simplemente saben enseñar… pero la pregunta es ¿Qué enseñan?.
Justamente el énfasis no se coloca ya en los contenidos disciplinares de lo que se denomina “saber muerto”; sino en el “saber hacer”, es decir aprender de la experiencia. La fundamentación incluso de la escasa formación disciplinar docente se fundamentajustamente en la formación permanente del mismo, para construir su aprendizaje. El docente deberá demostrar al niño como se construye cada saber y el mejor método para ello será sin duda el juego.
Entonces nos encontramos con un docente que en lugar de preparar al niño para un mundo adulto del trabajo, mantiene la autonomía del mundo infantil educando a través del juego. Lo cual generasimplemente la exclusión e imposibilidad del niño a integrarse al mundo adulto.
Claramente esto va en contra del propio desarrollo humano y rompe con la natural relación que debe existir entre los adultos y los niños; fundamental para asegurar la reproducción social.
“La educación moderna, en la medida en que aspira a establecer un mundo de niños, destruye las condiciones necesarias...