La biblia: historia exacta y profecía confiable
2010
La Biblia: libro de hechos y profecías. La Biblia: Historia exacta y profecía confiable
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n las proximidades del río Nilo, las pirámides han sido testigos silenciosos de la salida del sol por más de 3500 años. El Coliseo de Roma está vacío, hace unos 1900 años resonaban aquí los vítores de las muchedumbres que aclamaban a los gladiadores combatientes. Un relieve en un muro, un cilindro de arcilla, un antiguo guerrero… ¿Por qué deberían interesarnos hoy estos hallazgos y ruinas? Los vestigios del pasado están muy relacionados con un libro que afirma tener origen divino. Hombres fieles de Dios empezaron a escribir la Biblia hace unos 3500 años. Es en realidad una colección de libros proféticos, historia escrita por anticipado. Pero ¿es confiable? Y ¿cómo puede ayudarnos hoy? Para saberlo examinemos algunas profecías que se hayan en la Biblia. Por ejemplo, hace 2600 a el escritor bíblico Daniel vio en un sueño el ascenso y caída de cinco potencias mundiales, cuatro de ellas aun antes de que llegaran a existir. Estas potencias mundiales tendrían un efecto directo en el pueblo de Dios hasta nuestros días. Pero ¿de dónde consiguieron la información Daniel y los demás profetas? La Biblia contesta en Dan 2:28: “existe un Dios en los cielos
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que es un Revelador de secretos”. La fuente de la información confiable que contiene la Biblia es su autor Jehová Dios. Los descubrimientos arqueológicos prueban que la profecía de la Biblia es confiable, y que su historia es exacta. Para verificarlo repasemos la trayectoria de algunas potencias mundiales.
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¿Cuál fue la primera potencia mundial que gobernó sobre el pueblo de Dios, los israelitas? Egipto, que se menciona más de setecientas veces en la Biblia. ¿Es exacta la descripción que hace la Biblia del antiguo Egipto? 2 Crónicas 12:2 dice: “Aconteció que, en el año quinto del rey Rehoboam, Sisaq el rey de Egipto subió contra Jerusalén”. ¿Qué dice la historia? Los egipcios eran grandes guerreros y dejaron constancia de sus campañas militares. Una inscripción del Templo de Karnak (Egipto) menciona las ciudades israelitas que tomó el faraón egipcio Sisaq. Como la Biblia indicaba los egipcios eran una verdadera potencia militar. El Nilo, el río más largo de la tierra, ha sido siempre el alma de la vida egipcia. Los libros bíblicos de Génesis y Éxodo, muestran con exactitud que el Nilo era la fuente principal de alimento y agua de Egipto. El libro de Números dice que cuando los israelitas vagaron por el desierto anhelaron la variedad de alimento que dejaron atrás en Egipto. Las pinturas de algunas tumbas representan la vida en el antiguo Egipto, tal como Moisés el primer escritor de la Biblia la describió, un país que abundaba en alimento. ¿En qué se diferenciaba la religión de Egipto de la de los israelitas? Se creía que los gobernantes eran dioses, por lo que el altivo faraón despreció al Dios israelita Jehová: “¿Quién es Jehová, para que yo obedezca su voz…? No conozco a Jehová en absoluto…” Faraón no era el único dios al que adoraban los egipcios, en la tumba del faraón Tutmosis III, se hallaron los nombres de otros setecientos cuarenta dioses. Muchos de sus dioses tenían cuerpos humanos y cabezas de animales. Es fácil entender porqué Jehová prohibió el empleo de imágenes en la adoración, como se dice en Deuteronomio 4:16 ‐ 19:
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“Para que no obren ruinosamente y realmente no se hagan una imagen tallada, la forma de símbolo alguno, la representación de bestia alguna que haya en la tierra, de pájaro alado alguno que vuele en los cielos, de pez alguno que esté en las aguas debajo de la tierra; y realmente te dejes seducir y te inclines ante ellos y les sirvas...” ...
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