La Confirmacion

CONFIRMANDO LA FE

En la Edad Media, aquellos hombres de gran valor y nobleza que serían armados Caballeros se preparaban en oración y penitencia durante toda la noche, para; a la mañana siguiente,en medio de una ceremonia maravillosa, llena de pompa y solemnidad, recibir la investidura de manos del Rey.
Arrodillados frente al Rey juraban fidelidad y servicio, primero ante Dios, y luego anteél. Este empuñaba su espada y tras tocar el hombro izquierdo y el derecho, rozaba la mejilla del noble con su espada, como signo de que estaría dispuesto a luchar hasta el final por su Rey.
La Iglesiasiempre ha entendido la Confirmación como un sacramento de madurez, por medio del cual nos hacemos soldados del Cristo, dispuestos a dar testimonio del Evangelio y de comprometer nuestra vida en latransformación del mundo, comenzando; en primer lugar, por nuestro propio mundo personal en el cual debe ser combatido el pecado; pecado que entristece, esclaviza, deprime, no permite la apertura a latrascendencia y contagia al entorno.
El pasado 22 y 23 de octubre los jóvenes del grado 9° del Hogar Nueva Granada asistieron a un retiro espiritual generosamente subsidiado por la Fundación MaríaReina de la Paz a través de su directora, la señora Paula López Espinosa, en el que tuvieron la oportunidad de reflexionar sobre el sentido que tiene el sacramento de la Confirmación para un joven delS. XXI, con todos los retos que este siglo exige de un ser humano.
En este retiro hubo tiempo para la diversión, para la oración profunda, para la risa y el llanto, para soñar y contemplar sueños yacumplidos, y para comprender que vale la pena seguir a Cristo, que aun hoy Cristo vive en un mundo que se presiente alejado de Dios, y que el Espíritu Santo desea fervorosamente anidar en los corazonesde todos aquellos que anhelan una comunidad de Amor, de oportunidades justas, de vida plena, de “buenas noticias” como las que porta el Evangelio desde hace más de dos mil años en los que lleva...