La Enciclica Rerum Novarum

LA ENCICLICA Y LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES:

Independientemente de cuáles son los intereses y motivaciones que subyacen para su proclamación, lo cierto es que la encíclica marca un hito de la historia en la defensa de los derechos de la clase obrera. Desde una perspectiva orientada hacia los cristianos, León XIII va delineando un programa que aborda las más sensibles y necesitadasreivindicaciones del proletariado en ese momento de la historia, constituyéndose en el primer manifiesto desde una perspectiva no socialista, de reivindicación de estos derechos, que con todo el poder y autoridad de la Iglesia Católica, tuvieron indudablemente un peso y trascendencia en todas las naciones.

“El trabajo demasiado largo o pesado y la opinión de que el salario es poco dan pie confrecuencia a los obreros para entregarse a la huelga y al ocio voluntario. A este mal frecuente y grave se ha de poner remedio públicamente, pues esta clase de huelga perjudica no sólo a los patronos y a los mismos obreros, sino también al comercio y a los intereses públicos; y como no escasean la violencia y los tumultos, con frecuencia ponen en peligro la tranquilidad pública. En lo cual, lo más eficazy saludable es anticiparse con la autoridad de las leyes e impedir que pueda brotar el mal, removiendo a tiempo las causas de donde parezca que habría de surgir el conflicto entre patronos y obreros”

Bajo esta lógica, la encíclica aborda de la siguiente forma las causas que hay que remover a tiempo para impedir que pueda brotar el mal, haciendo surgir el conflicto entre patronos y obreros:a) La jornada laboral:
El Papa se refiere en primer lugar a la jornada laboral, no puede permitirse los extremos de explotación al que son sometidos los trabajadores y el Estado debe intervenir: “De igual manera hay muchas cosas en el obrero que se han de tutelar con la protección del Estado. A nadie le está permitido violar impunemente la dignidad humana. De aquí se deduce la necesidad deinterrumpir las obras y trabajos durante los días festivos. Unido con la religión, el descanso aparta al hombre de los trabajos y de los problemas de la vida diaria, para atraerlo al pensamiento de las cosas celestiales…. Por lo que respecta a la tutela de los bienes del cuerpo y externos, lo primero que se ha de hacer es librar a los pobres obreros de la crueldad de los ambiciosos, que abusan de laspersonas sin moderación, como si fueran cosas para su medro personal. O sea, que ni la justicia ni la humanidad toleran la exigencia de un rendimiento tal, que el espíritu se embote por el exceso de trabajo y al mismo tiempo el cuerpo se rinda a la fatiga…… que el trabajo se interrumpa de cuando en cuando y se dé lugar al descanso…… Se ha de mirar por ello que la jornada diaria no se prolongue máshoras de las que permitan las fuerzas... Establézcase en general que se dé a los obreros todo el reposo necesario para que recuperen las energías consumidas en el trabajo, puesto que el descanso debe restaurar las fuerzas gastadas por el uso. En todo contrato concluido entre patronos y obreros debe contenerse siempre esta condición”
b) El trabajo infantil:
La encíclica aborda directamente eltema de la explotación al trabajo infantil, muy común en el contexto de la época: “Finalmente, lo que puede hacer y soportar un hombre adulto y robusto no se le puede exigir a una mujer o a un niño. Y, en cuanto a los niños, se ha de evitar cuidadosamente y sobre todo que entren en talleres antes de que la edad haya dado el suficiente desarrollo a su cuerpo, a su inteligencia y a su alma”
c) Eltrabajo de la mujer:
Por primera vez se aborda el tema del trabajo de la mujer, desde una perspectiva del pensamiento del papel que ésta debe jugar en la sociedad que prevalecía en aquella época, pero defendiéndola de la explotación a la que es sometida en los talleres de los capitalistas: “Igualmente, hay oficios menos aptos para la mujer, nacida para las labores domésticas; labores estas que...