La Hostilidad Al Pensamiento

La sociedad ya no nos invita a pensar. A medida que se afirma la creencia de que el conocimiento no hace más feliz a la gente, el valor de la razón se pone en duda. Y entonces pensar es percibidocomo algo inútil, un tormento indeseable. Somos convocados a rendir culto a la espontaneidad, a buscar ese disfrute sin cuestionamientos que logramos cuando comemos un buen plato o cuando nosentretenemos viendo una película que olvidamos de inmediato. Se hace sentido común la idea de que pensar es excluirse de la vida, renunciar a ser; y que solo dejando de pensar se puede realmente ser. Por tanto,lo sensato es vivir intensamente tras la pista de nuestros deseos. Este discurso, hoy dominante, es muy persuasivo. No hay que hacerse problemas por gusto; esta es la prédica de hoy. Se trata de vivirel momento. Pensar sería como un vicio que termina hundiendo a su víctima en la tristeza, la depresión y, eventualmente, el suicidio. El personaje que mejor representa esta propuesta, de vivir la“espontaneidad feliz”, es Homero Simpson.
Este discurso se plantea como resultado de un aprendizaje, de una crítica al iluminismo de la gente de cultura, como una constatación de que pensar, pornecesidad o por gusto, no resuelve nada y complica inútilmente la vida. El único pensamiento legítimo es el dedicado a solucionar problemas concretos. En cambio pensar más allá de las necesidades inmediatas,en las estrellas y los infiernos, es necio, inconducente. Las cosas que no tienen solución inmediata no deben de ser aceptadas como problemas. No hay que inquietarse por gusto.
Pero ¿pueden dejarser problemas, inquietudes, las situaciones indeseables que no tienen una solución inmediata? ¿podemos dejar de pensar por gusto? ¿es cierto que pensar complica inútilmente la vida? ¡Qué preguntas tandifíciles! Empecemos afirmando que pensar por gusto significa erotizar el ejercicio de la razón, convertirlo en un fin en si, en un ejercicio placentero. Durante mucho tiempo la sociedad nos...