La movida madrileña

Luego de vivir bajo el régimen dictatorial franquista durante más de 30 años, los españoles desarrollaron hacia mediados de la década del ‘70 un espíritu colectivo pleno de libertades que se conoció como el ‘gran destape’ español. El nuevo sentimiento social encontró su expresión más elocuente en la ciudad capital, dando paso a lo que se conoció como la Movida madrileña, ya en la década del’80. La desaparición de la dictadura no supuso tan sólo su extinción como sistema político, sino también el final de una estructura ideológica que había infiltrado las prácticas sociales cotidianas, desde la reunión con los amigos a las relaciones sexuales, desde el sistema educativo a las prácticas culturales. Teresa Vilarós, investigadora de la transición desde el punto de vista cultural, haobservado que la desaparición de Franco y el cambio de régimen supusieron también el fin de antifranquismo y con ello la instauración de nuevas pautas culturales.

El contexto de la transición

En 1975 murió Franco y las instituciones del franquismo, en connivencia con la
oposición al régimen, iniciaron el proceso de autoliquidación que daría paso a la democracia en un período conocido como latransición, que finalizó con la llegada de los socialistas al poder en 1982. La transición no fue sólo un fenómeno político sino que tuvo consecuencias sociales y culturales: con la desaparición del dictador desaparecía también el antifranquismo como forma socio-cultural, con prácticas, valores y experiencias propias, y como proyecto, ya que la realización de los planes de base marxista fue descartadacon el fin de olvidar el pasado como base para una nueva etapa.

Muchos de los implicados en el antifranquismo abrazaron las nuevas reglas de juego con mucha fe, mientras que otros defendieron sus antiguas posiciones. Una amplia mayoría optó por una vía intermedia: ya que el discurso social dominante obligaba a abandonar el pasado, y su propia experiencia les decía que luchar por el futuroterminaba en el desencanto, se instalaron en un presente continuo. Esta tendencia se dio mayormente entre los jóvenes y la gente de mediana edad, que quedaron en una instancia intermedia en la vida política española. Hooper explica que en esa transición entre dictadura y democracia se encontraron con una generación aún más joven, que fue la que le daría impulso a la Movida.

El desencantogeneralizado hacia lo político fue el caldo de cultivo de la Movida. Por primera vez en años, lo cultural no iba a servir como vehículo de mensajes políticos ya que esta esfera había logrado su autonomía en el marco de la incipiente democracia. La gente se movía autónomamente, porque ya no había movimientos sociales ni se identificaba con un movimiento nacional. Lo característico de la Movida es quedisolvía esa situación. Según Blázquez, autor citado por Gallero, la gente quería tener una vida más abierta, que no pasaba por interpretar ningún rol social preestablecido, sino por salir a la calle y ver lo que sucedía, incorporarse a la nueva dinámica de la época.
El movimiento además contó con el respaldo de algunos políticos, principalmente socialistas, entre los que destacaron el entoncesalcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, que había estudiado profundamente la cultura marginal juvenil desde un punto de vista sociológico. El apoyo político a esta cultura alternativa pretendía mostrar un punto de inflexión entre la sociedad franquista y la nueva sociedad de la democracia; esta imagen de una España ‘moderna’, o, cuanto menos, abierta a la modernidad, fue utilizada internacionalmentepara combatir la imagen negativa que el país había adquirido a lo largo de cuatro décadas de dictadura.
El Ayuntamiento de Madrid hizo un esfuerzo al subvencionar los macro-conciertos de las grandes figuras del rock and roll internacional, poniéndolos al alcance de cualquier bolsillo, e incorporándolos al calendario de las fiestas populares, como San Isidro o los Carnavales. En este sentido,...