“La Nación se hizo carne. España, 1808”
Páginas: 25 (6217 palabras)
Publicado: 10 de diciembre de 2013
Aula de Cultura ABC
Fundación Vocento
Martes, 9 de junio de 2008
“La Nación se hizo carne. España, 1808”
D. Ricardo Martín de la Guardia, D. César Alonso de los Ríos y
D. Fernando García de Cortázar
Ricardo Martín de la Guardia
Catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Valladolid.
La Guerra de la Independencia proporcionó un escenario adecuado para eldesarrollo rápido e intenso de la idea nacional española dentro de las categorías de la naciente contemporaneidad. En Cádiz terminaron por forjarse los fundamentos de un primer edificio constitucional de la Nación, superadora de sentimientos y lealtades locales propios de un Antiguo Régimen que, a pesar de su resistencia, iniciaba ahora su declive. Muchos de los discursos, textos dispersos y obrasde los prohombres liberales que en su mayoría llegaron a coincidir en algún momento en aquel rincón de España irradian la fuerza de una nación emergente que también hace suyo el concepto de patria.
Como se ha dicho en muchas ocasiones, la Nación española se concibe como un sujeto político neto, soberano, compuesto por individuos libres e iguales ante la Ley; un sujeto político que arrincona lavieja idea del súbdito y del vasallo: Nación, pues, entendida como conjunto de todos los españoles de una y otra orilla del Atlántico, de uno y otro hemisferio, y organizada según el ejercicio de un poder público capaz de fomentar y garantizar el libre desarrollo de la persona – del ciudadano – en la sociedad. En las discusiones sobre el artículo tercero de la Constitución, Juan Nicasio Gallego loexpresó con nitidez:
Una nación es una asociación de hombres libres que han convenido voluntariamente en componer un cuerpo moral, el cual ha de regirse por leyes que sean el resultado de la voluntad de los individuos que lo forman, y cuyo único objetivo es el bien y la utilidad de toda la sociedad.
Así se funden en un todo armonioso Nación y Libertad, articuladas mediante la prácticaparlamentaria. Si en los acontecimientos de la guerra contra el francés se gesta un sentimiento popular de Nación, de forma paralela los trabajos de Cortes, precedidos de las reflexiones de ilustrados y liberales, concluyen en la definición de la Nación Española. Nación y Libertad, por tanto, unen sus fundamentos (uno de los grandes logros de los doceañistas) para alumbrar un Estado de ciudadanos quesurge y se legitima frente a los deplorables acontecimientos de Bayona: Nación frente a Reino, concepto éste preferido por las elites más conservadoras; Libertad e Igualdad frente a Fuero.
La Guerra de la Independencia y, sobre todo, la labor de las Cortes de Cádiz dotaron de significado moderno a términos como liberal, ciudadano y Constitución, poco antes identificados, con vitola de galicismos,con la traumática Revolución Francesa. El empeño de los hombres de Cádiz por asignarles un contenido pleno y nítido, evitando confusiones, se desprende de la intervención de Agustín de Argüelles en las Cortes el 4 de septiembre de 1811:
La palabra ciudadano no puede entenderse ya en el sentido tan vago e indeterminado que ha tenido hasta aquí. Aunque término antiguo, acaba de adquirir por laConstitución un significado conocido, preciso y exacto.
El ciudadano era ciudadano de una nación. La crisis de la Monarquía y del Estado borbónico abrió las puertas a este nuevo concepto, la nación, ente abstracto considerado como fuente de legitimidad que en el espíritu de los liberales debía asumir la reorganización de la vida pública española a través de su representación en Cortes. La naciónse convierte en un concepto operativo en el terreno político, en un espacio formado por ciudadanos libres e iguales con capacidad de gobernarse a sí mismos. A partir de 1808 el “momento de la patria” dejó paso al “momento de la nación”. En un hipotético caso, incluso, la nación subsistiría al margen de la Monarquía y del Estado.
Las emociones y los sentimientos populares de agravio y...
Fundación Vocento
Martes, 9 de junio de 2008
“La Nación se hizo carne. España, 1808”
D. Ricardo Martín de la Guardia, D. César Alonso de los Ríos y
D. Fernando García de Cortázar
Ricardo Martín de la Guardia
Catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Valladolid.
La Guerra de la Independencia proporcionó un escenario adecuado para eldesarrollo rápido e intenso de la idea nacional española dentro de las categorías de la naciente contemporaneidad. En Cádiz terminaron por forjarse los fundamentos de un primer edificio constitucional de la Nación, superadora de sentimientos y lealtades locales propios de un Antiguo Régimen que, a pesar de su resistencia, iniciaba ahora su declive. Muchos de los discursos, textos dispersos y obrasde los prohombres liberales que en su mayoría llegaron a coincidir en algún momento en aquel rincón de España irradian la fuerza de una nación emergente que también hace suyo el concepto de patria.
Como se ha dicho en muchas ocasiones, la Nación española se concibe como un sujeto político neto, soberano, compuesto por individuos libres e iguales ante la Ley; un sujeto político que arrincona lavieja idea del súbdito y del vasallo: Nación, pues, entendida como conjunto de todos los españoles de una y otra orilla del Atlántico, de uno y otro hemisferio, y organizada según el ejercicio de un poder público capaz de fomentar y garantizar el libre desarrollo de la persona – del ciudadano – en la sociedad. En las discusiones sobre el artículo tercero de la Constitución, Juan Nicasio Gallego loexpresó con nitidez:
Una nación es una asociación de hombres libres que han convenido voluntariamente en componer un cuerpo moral, el cual ha de regirse por leyes que sean el resultado de la voluntad de los individuos que lo forman, y cuyo único objetivo es el bien y la utilidad de toda la sociedad.
Así se funden en un todo armonioso Nación y Libertad, articuladas mediante la prácticaparlamentaria. Si en los acontecimientos de la guerra contra el francés se gesta un sentimiento popular de Nación, de forma paralela los trabajos de Cortes, precedidos de las reflexiones de ilustrados y liberales, concluyen en la definición de la Nación Española. Nación y Libertad, por tanto, unen sus fundamentos (uno de los grandes logros de los doceañistas) para alumbrar un Estado de ciudadanos quesurge y se legitima frente a los deplorables acontecimientos de Bayona: Nación frente a Reino, concepto éste preferido por las elites más conservadoras; Libertad e Igualdad frente a Fuero.
La Guerra de la Independencia y, sobre todo, la labor de las Cortes de Cádiz dotaron de significado moderno a términos como liberal, ciudadano y Constitución, poco antes identificados, con vitola de galicismos,con la traumática Revolución Francesa. El empeño de los hombres de Cádiz por asignarles un contenido pleno y nítido, evitando confusiones, se desprende de la intervención de Agustín de Argüelles en las Cortes el 4 de septiembre de 1811:
La palabra ciudadano no puede entenderse ya en el sentido tan vago e indeterminado que ha tenido hasta aquí. Aunque término antiguo, acaba de adquirir por laConstitución un significado conocido, preciso y exacto.
El ciudadano era ciudadano de una nación. La crisis de la Monarquía y del Estado borbónico abrió las puertas a este nuevo concepto, la nación, ente abstracto considerado como fuente de legitimidad que en el espíritu de los liberales debía asumir la reorganización de la vida pública española a través de su representación en Cortes. La naciónse convierte en un concepto operativo en el terreno político, en un espacio formado por ciudadanos libres e iguales con capacidad de gobernarse a sí mismos. A partir de 1808 el “momento de la patria” dejó paso al “momento de la nación”. En un hipotético caso, incluso, la nación subsistiría al margen de la Monarquía y del Estado.
Las emociones y los sentimientos populares de agravio y...
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