La Noche Del Angel

La noche del ángel.
Hace un par de años pasó algo muy extraño. Era 23 de diciembre y salí del trabajo muy cansada. No planeaba nada, solo quería fumarme un cigarro y tomarme una cerveza fría para ver las estrellas, las cuales siempre han sido mi fascinación, desde que era niña; porque siempre parecen estar todas reunidas, pero no son más que un montón de gigantes y solitarias en el universo.Ese día mis compañeros trataron de convencerme de ir con ellos a la fiesta de navidad del hospital donde trabajamos, pero no sentí ganas de ir. Había trabajado todo el día, toda la semana, todo el mes y por fin ese miserable momento de fumar y tomar una cerveza fría iba a ser todo mío.
Saliendo de trabajar fui a una tienda y compré lo que sería mi tentempié de viernes por la noche. Conduje hastalas afueras de la ciudad, donde no hay alumbrado público ni letreros luminosos brillantes que molesten a una persona aficionada a la astronomía como yo. Ya sentada en mi lugar favorito fumando y tomando, comencé a medir mi vida como de costumbre. ¿Por qué no estoy casada?, ¿Por qué no tengo familia?, ¿Por qué no tengo un perro como mi hermana?, ¿Por qué no tengo hijos? Preguntas como esas metaladraban el pensamiento en esos momentos de ocio, y sobre todo fines de semana como ese, mientras mi hermana seguramente estaba con sus hijos en el cine, y mis amigos estaban preparándose para ir a la fiesta de navidad de la oficina. ¿Y yo? Sentía que ya me había rendido hace algunos meses.
Mientras estaba analizándome a mí misma, llegó un momento en el que de la nada sentí algo raro, repentinamentecomencé a sentirme vulnerable. Por muy incómodo que fuera, trate de sentir el miedo para poder dominarlo. Al ser psicóloga, tengo bastante conocimiento para usar técnicas que me ayudan con la ansiedad y el miedo. Comencé a practicar algunos ejercicios de respiración y meditación, hasta que un sonido me distrajo, un ruido algo industrial, parecía una maquina moviéndose a través del bosque. Primeropensé que era un camión, pero el sonido era extrañamente melodioso y se hacía cada vez más fuerte. Antes de ver la maquina vi la luz que emitía; todo comenzó a iluminarse con una luz morada que nunca había visto. Aunque tenía miedo, la curiosidad me mantuvo ahí, hasta que inesperadamente la luz morada me enfocó, cegándome y alterándome a la vez.
Sin poder ver, traté de levantarme del suelo,caminé con pasos torpes tratando de controlar mis nervios alterados; pero choqué contra lo que creí era un animal grande… Pensé que era un oso y el miedo me paralizó. Estaba frustrada porque no podía ver nada y mi mente me traicionó al darme imágenes terribles. Me vi morir más de 100 veces devorada por un animal infame, cada muerte era peor que la anterior. Solo pude llorar y colocarme en posiciónfetal ahí, ciega y paralizada; despidiéndome mentalmente de los míos.
No estoy segura cuántos minutos pasaron desde que me resigné a que iba a morir, pero el tiempo que estuve en posición fetal me pareció una eternidad. Mis ojos se acostumbraron un poco a la luz, los abrí… solo pude ver sombras y siluetas que cobraron vida entre la luz morada; no vi ningún oso, pero las sombras parecían maliciosasy estrategas criaturas. Terminé entregándome total y completamente a lo que pudiera pasar. Sentí que unas manos delgadas y peludas me tomaban del cuello, y me arrojaban adentro de la maquina rápidamente. En la maquina recuerdo que estaba temblando pues había chocado contra un metal muy frio. Creo que después de unos 3 minutos de estar ahí dentro me desmayé, porque de ahí en adelante no me acuerdode absolutamente nada.
Al día siguiente, recuerdo que desperté y por primera vez en un par de meses se sintió bien abrir los ojos. Físicamente no sentía ningún rasguño, revise mi torso en busca de hematomas causados por la manera en que me arrojaron al camión pero no tenía nada; incluso, me sentía mejor que nunca.
Después de pensar un rato en la cama, intenté encontrar una explicación a mi...