La persuasion

La persuasión por el orden
Una revitalización de la Dispositio retórica

Mtro. Alejandro Tapia

Estimados amigos

Uno de los fenómenos que fueron decisivos en el surgimiento de la retórica antigua fue la conciencia adquirida por la joven democracia griega respecto al el orden social, al que veían como una construcción hecha por los hombres y no por los dioses. Para esta forma innovadora depensamiento, las instituciones, las palabras, los conceptos rectores y las formas de organización colectiva no dependían de principios necesarios, sino posibles, y al mirarlos como artificios históricos elaborados humanamente era factible preguntarse acerca de su estructura y sus efectos prácticos, abriendo una brecha enrome para intervenir sobre ellos. Este descubrimiento recibió desde luego laoposición manifiesta del pensamiento conservador, enormemente dependiente de la creencia en la inmanencia de las costumbres y los principios. Pero puesta en marcha una autoconciencia sobre las agencias propias y sobre el poder del hombre de modificarlas, su desenvolvimiento era inevitable.
Mark Bakcman, quien estudia dicho periodo1, plantea este descubrimiento en primera instancia como productode la sofística: los sofistas se planteaban preguntas tales como ¿son las cosas como parecen? ¿han sido las cosas siempre así? ¿es el orden de las cosas algo necesario o algo contingente? ¿se pueden generar otros principios? Tales preguntas no eran cuestiones filosóficas puramente especulativas, sino que tenían profundos efectos prácticos para la vida social. Esta actitud planteada por lossofistas habría inaugurado un nuevo tipo de conciencia, la conciencia de sí mismos y del propio poder a los agentes dispuestos a preguntarse por la génesis de las nociones y a mirar al lenguaje como una tejné, es decir como una herramienta y no como una emanación de lo real. Simplemente hacía evidente que lo real podía ser moldeado, y tal actitud pasó a ser uno de los elementos esenciales de larevolución griega del pensamiento y, más tarde, del hombre occidental.
Desde luego la conciencia del propio ser y del propio poder está anclada también al despliegue de la retórica, tal como se manifiesta de forma temprana en la obra de Corax y Tisias, de Gorgias y de Protágoras, que marcaron el carácter revolucionario de la retórica antes incluso que Aristóteles. Para ellos, los principios deoportunidad, de situación y la máxima de que el hombre es la medida de las cosas, serían motores de la construcción de la nueva democracia griega, y sus efectos sobre Atenas pronto dejaron hacerse ver: era el surgimiento de un nuevo tipo de sociedad. La retórica se planteaba que las cosas están organizadas desde lugares de pensamiento, territorios construidos por hombres concretos en circunstancias concretasy cuyos efectos son persuasivos, pues incluyen la intención de moldear los juicios de otros. La retórica no concede en este sentido inmanencia alguna o universalidad para los productos humanos, todos son estructurados desde una óptica y con base a ciertas metáforas para persuadir; la retórica es pues una ciencia social que tiene poderosas consecuencias epistemológicas y culturales y que ve en laspretensiones de verdad un instrumento artificial hecho para defender intereses. De ahí que siempre haya sido atacada o que se haya intentado a través de los siglos reducirla a una ciencia de la ornamentación, pues representa la capacidad técnica de reorganizar las situaciones, las creencias y los postulados con los que operan el Estado y las Instituciones.
El desarrollo de la retórica ha sidodesigual a través de los siglos, a veces explotada aunque ocultada en los monasterios, otras resuelta pragmáticamente como en el renacimiento y otras atacada por la racionalidad, es una actividad que sin embargo no cesa de manifestarse en sus aspectos estructurantes: ella está presente en nuestras actividades filosóficas, académicas, en nuestra literatura, nuestros discursos políticos, nuestras...