LA SEGURIDAD PUBLICA EN EL SIGLO XXI.
Páginas: 16 (3893 palabras)
Publicado: 28 de octubre de 2013
La Seguridad Pública en el Siglo XXI.
JORGE ARELLANO MEDINA*
El país transita por su momento más crítico de inseguridad y violencia de los últimos 20 años. Transita sin rumbo claro, ante una suerte de confusión nacional de orden conceptual, institucional y estratégica.
La confusión es de tal magnitud, que su reflejo más evidente se materializó el pasado año ante laMarcha por la Paz con Justicia y Dignidad. Los contenidos de sendos comunicados, tanto de los organizadores que apelan por vertientes de mayor prevención social y atención a las causas, como aquella del gobierno federal que mantiene la perspectiva reactiva en su propia definición de guerra contra el narcotráfico, acusan marcadas diferencias respecto de las políticas diseñadas para disminuir laimpunidad, la corrupción y la violencia asociada a más de 50 mil ejecuciones.
Es así que, como escribía Octavio Paz en su Ogro Filantrópico:…el Estado en su supuesto afán de bienestar a sus súbditos, está terminando por comérselos vivos. La desesperanza y la incertidumbre son las señales presentes en nuestra convivencia cotidiana y por ello, es impostergable abrir espacios a la discusión como el deesta tarde.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Según los resultados de estudios relacionados con la cifra negra, victimización y eficiencia de las instituciones del sistema de seguridad pública, la impunidad representa el 97% de los presuntos delitos en el país. En consecuencia, el diseño y ejecución de la política pública relacionada con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, debe considerar estavariable como la piedra angular del problema.
En 1764, el criminólogo Cesar Beccaria, en su famoso tratado De los delitos y las penas, señaló que:…la inhibición de los delitos no se logra con la severidad de las penas, sino mediante la aplicación de éstas.
En México existe una marcada tendencia a emprender modificaciones y nuevos ordenamientos legales, asumiendo que su sola promulgaciónhace realidad el principio de efectividad que, en la práctica, se convierte en letra muerta. Es decir, leyes vigentes sin derecho positivo.
La premisa fundamental para aspirar al Estado de derecho, debe ser aquella en la que se mantienen los principios de seguridad y certeza jurídica, como pilares de la justicia y el bien común. En la actualidad, se mantiene una tendencia institucional muy débilpara comprender la dimensión de esta génesis jurídica, destacando en su lugar, el método reactivo de sangre y fuego como sustento de la actual estrategia nacional.
Es prudente indicar que la seguridad pública, entendida como sistema, tiene un nacimiento jurídico-constitucional reciente y, por decirlo de alguna forma, frágil.
Su fragilidad se refleja ante la inadecuada interpretación delos principios transversales de la prevención social y situacional; la persecución e investigación de los hechos delictivos; la aplicación de las penas, y; la reinserción de los responsables, que son los eslabones inseparables de esta cadena. Aunado a lo anterior, las obligaciones vinculantes establecidas a los tres órdenes de gobierno, no están debidamente reglamentadas, lo que ocasiona ambigüedaden su interpretación.
Este ensayo, pretende describir las confusiones actuales y aportar ideas para discusión basadas en los extravíos de origen Conceptual que, posteriormente afectan considerablemente el andamiaje Institucional y, fatalmente, perjudican el diseño Estratégico.
ESCENARIO DE CONFUSIONES:
1.- CONCEPTUAL
Por años los temas asociados a policía, ministerios públicos,jueces y reclusorios fueron tratados como figuras independientes y únicamente desde la perspectiva del derecho penal. Dichas estructuras y sus políticas no representaban mayor problema para la población, porque la sociedad era menos compleja.
En 1950 México tenía únicamente 25 millones de habitantes; treinta años después sumábamos casi 70 millones y en 2012 superamos ya los 110 millones. El...
JORGE ARELLANO MEDINA*
El país transita por su momento más crítico de inseguridad y violencia de los últimos 20 años. Transita sin rumbo claro, ante una suerte de confusión nacional de orden conceptual, institucional y estratégica.
La confusión es de tal magnitud, que su reflejo más evidente se materializó el pasado año ante laMarcha por la Paz con Justicia y Dignidad. Los contenidos de sendos comunicados, tanto de los organizadores que apelan por vertientes de mayor prevención social y atención a las causas, como aquella del gobierno federal que mantiene la perspectiva reactiva en su propia definición de guerra contra el narcotráfico, acusan marcadas diferencias respecto de las políticas diseñadas para disminuir laimpunidad, la corrupción y la violencia asociada a más de 50 mil ejecuciones.
Es así que, como escribía Octavio Paz en su Ogro Filantrópico:…el Estado en su supuesto afán de bienestar a sus súbditos, está terminando por comérselos vivos. La desesperanza y la incertidumbre son las señales presentes en nuestra convivencia cotidiana y por ello, es impostergable abrir espacios a la discusión como el deesta tarde.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Según los resultados de estudios relacionados con la cifra negra, victimización y eficiencia de las instituciones del sistema de seguridad pública, la impunidad representa el 97% de los presuntos delitos en el país. En consecuencia, el diseño y ejecución de la política pública relacionada con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, debe considerar estavariable como la piedra angular del problema.
En 1764, el criminólogo Cesar Beccaria, en su famoso tratado De los delitos y las penas, señaló que:…la inhibición de los delitos no se logra con la severidad de las penas, sino mediante la aplicación de éstas.
En México existe una marcada tendencia a emprender modificaciones y nuevos ordenamientos legales, asumiendo que su sola promulgaciónhace realidad el principio de efectividad que, en la práctica, se convierte en letra muerta. Es decir, leyes vigentes sin derecho positivo.
La premisa fundamental para aspirar al Estado de derecho, debe ser aquella en la que se mantienen los principios de seguridad y certeza jurídica, como pilares de la justicia y el bien común. En la actualidad, se mantiene una tendencia institucional muy débilpara comprender la dimensión de esta génesis jurídica, destacando en su lugar, el método reactivo de sangre y fuego como sustento de la actual estrategia nacional.
Es prudente indicar que la seguridad pública, entendida como sistema, tiene un nacimiento jurídico-constitucional reciente y, por decirlo de alguna forma, frágil.
Su fragilidad se refleja ante la inadecuada interpretación delos principios transversales de la prevención social y situacional; la persecución e investigación de los hechos delictivos; la aplicación de las penas, y; la reinserción de los responsables, que son los eslabones inseparables de esta cadena. Aunado a lo anterior, las obligaciones vinculantes establecidas a los tres órdenes de gobierno, no están debidamente reglamentadas, lo que ocasiona ambigüedaden su interpretación.
Este ensayo, pretende describir las confusiones actuales y aportar ideas para discusión basadas en los extravíos de origen Conceptual que, posteriormente afectan considerablemente el andamiaje Institucional y, fatalmente, perjudican el diseño Estratégico.
ESCENARIO DE CONFUSIONES:
1.- CONCEPTUAL
Por años los temas asociados a policía, ministerios públicos,jueces y reclusorios fueron tratados como figuras independientes y únicamente desde la perspectiva del derecho penal. Dichas estructuras y sus políticas no representaban mayor problema para la población, porque la sociedad era menos compleja.
En 1950 México tenía únicamente 25 millones de habitantes; treinta años después sumábamos casi 70 millones y en 2012 superamos ya los 110 millones. El...
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