las 3 viudas

ACTO PRIMERO ESCENA I MARTINA, MICAELA MICAELA.- Basta, por Dios, de sermn, que esto, mam, no es vivir. MARTINA.- Vaya pues... con que es decir que yo hablo sin ton ni son Te oigo, nia, y no lo creo. MICAELA.- Cansa tanto machacar MARTINA.- Pues mira, no te he de dar en la yema del deseo. Te fastidio, no MICAELA.- De veras MARTINA.- Y lo afirmas. MICAELA.- Ya se ve. MARTINA.- Me oirs, lo llevo ahincapi, que quieras o que no quieras. (Recio) MICAELA.- No grite ust. MARTINA.- Y qu me hars Te has vuelto muy copetuda MICAELA.- Ya soy libre, ya soy viuda. MARTINA - Y qu ms.. a ver... qu ms MICAELA.- Slo por dar a usted gusto, y sin ponerle un distingo, me un ha poco con un gringo feo, pobretn y adusto. Me trat como a judo, vida de perros me dio, pero Dios lo recogi por su descanso yel mo. Ya a ser un ao por Mayo que no lo cubre este techo y que yo tengo el derecho de hacer de mi capa un sayo. MARTINA.- La noticia es algo fresca. MICAELA.- Fresca o aeja, mam, si ahora me caso, ser con quien mejor me parezca. MARTINA.- V que ese amor te arrebata. MICAELA.- El amar no es un delito, MARTINA.- Se te ha pegado el mocito lo mismo que garrapata. Vaya... si fuera algn Creso...mas quin es l, mi seora Un figurn de totora cosido con hilo grueso un manganzn sin oficio, hambriento, desoletado, anticucho mal formado, mueco de maleficio. MICAELA.- Las faltas que usted le imputa lo realzan ms a mis ojos. MARTINA.- Ay que capricho qu antojos MICAELA.- Sobre gustos no hay disputa. MARTINA.- No hace un ao que viuda es, y ya piensa en matrimonio MICAELA.- Tentaciones deldemonio Otras se casan al mes. MARTINA.- Lo que siento es el criterio. MICAELA.- No se tome ust ese afn si matara el qu dirn fuera Lima un cementerio. MARTINA.- Se acab si estoy que brinco... Qu diablo .y no se desnuca Que venga aqu el muca-muca, le dir cuntas son cinco. MICAELA.- Har usted mal. MARTINA.- Har bien. Soy acaso tu estropajo MICAELA.- Hable, usted mam, ms bajo. MARTINA.- Y am quin me manda, quin Pues no faltaba ms que esto MICAELA.- Parece usted negra criolla MARTINA.- La sartn le dice a la olla... MICAELA.- Gritona yo MARTINA.- Por supuesto. MICAELA.- Ser as. MARTINA.- Mira, Miquita, dejmonos de teoras ya nadie sufre ocho das un marido de rosita. Y lo digo aunque te pique, y aunque te d un patats tu novio se encuentra a flus y a tres dobles y un repique. Quhar, pues, sin nada suyo, sin ejercicio y sin blanca Clara est, montarse al anca de algn galancete tuyo. MICAELA.- Si cuando almuerza no cena, si est como nima en pena. MICAELA.- Sarna con gusto no pica. MARTINA.- Quien de esa argolla se agarra. tiene al pecho un crucifijo. MICAELA.- Pues fue un sabio quien lo dijo. MARTINA.- Otra cosa es con guitarra. MICAELA.- En fin, sea o no locura, yo loquiero y Santas Pascuas. MARTINA.- Despus te vers en ascuas, que amor con hambre no dura. MICAELA.- Basta, pues, no me impaciente, y haga hoy mismo un disparate. MARTINA.- Oiga, qu tal chocolate MICAELA.- Calle usted, que viene gente. ESCENA II DICHOS, DON MELITON MELITON.- Santos y felices das. MARTINA.- Oh, seor don Melitn, venga usted. MELITON.- Y cmo va MARTINA.- Ah tirando. MELITON.-No es lo peor, ms cuenta con tirar tanto, no se parta el hilo en dos. MARTINA.- Dios no lo quiera. MELITON.- As sea. MARTINA.- No lo esperaba a Ud. hoy. MELITON.- Al grano, doa Martina Y aquello se concluyo MARTINA.- Qu dir usted No he tenido todava proporcin de hablarla ni... MELITON.- Bueno, bueno, pues entonces lo har yo, Miquita esccheme usted. MICAELA.- Con mil gustos. MELITON.- Pues seor,mi cartula descubre desde a legua lo que soy, y si se juzga por ella, tengo ms lacras que Job sin embargo, an siento fuerzas, sea dicho ac entre nos, para no irme al otro barrio soltero y sin sucesin. MICAELA.- Lo juzgo piadosamente. MELITON.- Si sufro o no sufro error, eso se vera despus. Prosigo mi narracin confieso que el invierno suele atacarme la tos, pero con goma y linazas me...