Lectura inferencial
Desde luego las discusiones no versan en absoluto sobre golondrinas, como puede comprobarlo cualquiera que entienda el idioma de los dos tártaros.
- De todos los queconozco, usted es el más cronco -dice Calac.
- Y usted el más petiforro –dice Polanco -. Me llama cronco a mí, pero se ve que nunca se ha huesnado la cara en un espejo.
- Lo que usted busca espelearme, don –dice Calac.
Los dos se huesnan con una mulga tremenda. Entonces Polanco saca una tiza y dibuja un zote en el piso.
- Usted es el más cronco –dice Calac.
- Y usted el más petiforro–dice Polanco.
Calac tora el zote con la suela del zapato. Parece como si estuvieran a punto de amafarse.
- Usted es el más cronco –dice Calac.
- Y usted el más petiforro –dice Polanco.
- Loque usted busca es pelearme –dice Calac.
- Usted me toró el zote –dice Polanco.
- Yo se lo toré porque usted me motó de petiforro.
- Y lo moto de nuevo, si vamos a eso.
- Porque usted es uncronco –dice Calac.
- Un cronco es mucho más que un petiforro –dice Polanco.
Polanco saca un trefulgo del bolsillo y le pega a Calac que no se remune.
- Ahora usted me va a rebuyir lo de quesoy un cronco –dice Polanco.
- Yo a usted le rebuyo cualquier cosa y le toro cualquier zote –dice Calac.
- Entonces yo le amafo ese trefulgo en el mondongo.
- Lo mismo que usted será un cronco.- Y usted un pobre petiforro.
- Y a un cronco como usted se le toran todos los zotes aunque saque un trefulgo de seis estrellas.
- Yo a usted este trefulgo se lo amafo –dice Polanco que lo huesnapegadísimo–. A mí nadie me tora el zote ni me anda motando de cronco.
- La culpa de lo que pase la tendrá usted que me motó primero –dice Calac.
- Primero me motó usted –dice Polanco–. Yo entonceslo contramoté como correspondía y usted me toró el zote y me rebuyó lo de que soy un cronco.
- Yo se lo rebuyí porque usted me huesnó primero.
- ¿Y usted por qué me toró el zote?
- Yo se lo...
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