liberalismo y democracia

Revista de Difusión Electoral

Liberalismo, democracia y prohibición
de contratación de propaganda
en medios electrónicos
Raúl Calvo Barrera16
I.- INTRODUCCIÓN
En las líneas que siguen me propongo realizar un
análisis, tomando en consideración los postulados doctrinales del liberalismo político y económico, así como
de la teoría democrática, de la prohibición constitucional establecida,con motivo de la reforma constitucional
en materia electoral de 13 de noviembre del 2007, en el
numeral 41, fracción III, apartado A, párrafo tercero,
que establece que: “Ninguna otra persona física o moral, sea a título propio o por cuenta de terceros, podrá
contratar propaganda en radio y televisión dirigida a influir en las preferencias electorales de los ciudadanos,
ni a favor o en contrade partidos políticos o de candidatos a cargos de elección popular”.
Para ello, primeramente expondré las premisas
en torno a las cuales se sustenta el núcleo central del
liberalismo político y de la teoría económica liberal,
para después abordar la relación existente entre el Estado liberal y el sistema democrático. Una vez intentado
el ejercicio anterior, analizaré las proposicionesbásicas
de la teoría liberal en contraste con la prohibición recogida en la disposición constitucional mencionada de
tal manera que se pueda percibir la contradicción o los
puntos de contraste entre dicha teoría y el párrafo citado, al mismo tiempo que presentaré la coincidencia que
también puede desprenderse del planteamiento liberal a
favor del ejercicio del sufragio libre y auténtico de loselectores mexicanos.

crático en el que se garanticen las libertades de pensamiento, expresión y asociación; libertades civiles que
constituyen el cemento piramidal de la participación
política en una sociedad abierta.
De este modo, uno de los objetivos principales
del Estado liberal debe ser respetar y preservar la libertad individual de sus ciudadanos. Como lo ha manifes-

II.- LAS PREMISASDEL LIBERALISMO
La doctrina liberal parte del sustento básico de
que cada ser humano busca disfrutar el ejercicio de sus
propios poderes en libertad, ya que sólo así afirma su
individualidad distintiva.17 Por lo tanto, la mejor organización política tiene que ver con un sistema demoPolitólogo por la UNAM, abogado por la UAG. Especialista en Justicia Electoral por el Centro de CapacitaciónJudicial Electoral del
TEPJF. Consejero Electoral del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Guerrero.
17
Gray, John. Liberalismo, Nueva Imagen, México, 1992, p. 29 y ss.
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Tercera Epoca | 41

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tado Quentin Skinner, el Estado debe asegurar que sus
ciudadanos no sufran una interferencia injusta o innecesaria en la búsqueda de los objetivos que sehayan propuesto, a la vez que garantice que los integrantes de la
sociedad no caigan en una situación de dependencia de
la buena voluntad de otros ciudadanos. Para el liberalismo político, el Estado tiene el deber no sólo de liberar a
sus ciudadanos de esa explotación y dependencia, “sino
de evitar que sus propios representantes, investidos con
un poco de autoridad, se comporten en formaarbitraria
al imponer las reglas que rigen la vida en común”.18
En este sentido, uno de los precursores del liberalismo, John Locke señaló que: “Nadie tiene poder para
destruir su propia vida ni para arrebatar a otra persona
la vida o las propiedades. Hemos demostrado que nadie
puede someterse al poder arbitrario de otro; y puesto
que en el estado de Naturaleza nadie disponía de poder
arbitrariosobre la vida, la libertad o los bienes de otro,
y sí tan solo el que la Naturaleza le daba para la salvaguardia propia suya y del resto del género humano, eso
es todo lo que él da o puede entregar a la comunidad
política y, por intermedio de ésta, al poder legislativo.
No puede, pues, el legislador sobrepasar ese poder que
le entregan. El poder del legislador llega únicamente
hasta donde...