Libertados del pecado

Libertados del pecado
Por James Richards
Algo que ha mantenido a la gente en pecado más que cualquier otra cosa es la deficiencia en el entendimiento de la gracia. Definir a la gracia como nada más que un favor inmerecido, es pobremente decir que “Dios aún puede darme su favor cuando yo peco”. Tenemos una doctrina de gracia que dice que pecar está mal, sin embargo Dios titubea con mi pecado.¡Cuán contradictorio!
Lo que la verdad acerca de la gracia realmente dice es: “No tengo por qué pecar. El pecado no tiene poder sobre mí. No estoy limitado a mi habilidad para tratar con el pecado. Sí, Dios me seguirá amando y aceptando aunque peque, pero esa es una expresión de misericordia, no de gracia”.
Soy tan agradecido por el amor, misericordia y perdón de Dios cuando peco. Sin embargo, soymucho más agradecido por Su gracia que me libera de tener que ceder ante el pecado.
En la luz de esta verdad, el pecado respecto al Nuevo Testamento es mucho más serio que ante el Antiguo Testamento. Puesto que hemos sido libertados del pecado, todo acto de pecar es voluntario. Puede que sea cometido en ignorancia o desconocimiento, pero siempre es un acto de nuestra voluntad. Una persona salvasiempre escoge pecar. Siempre tratamos de convencernos de lo contrario, pero la verdad es que el pecado no tiene dominio sobre nosotros; pecar es siempre una elección.
Todo cristiano nacido de nuevo es libre del poder del pecado. Podemos escoger creer lo contrario y ceder ante el pecado, pero, independientemente de nuestro punto de vista u opinión, eso no cambiará el punto de vista y opinión deDios. Romanos 6:14 declara: “porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia”.
Algo asombroso del pecado es que no solamente es voluntario, sino que nosotros somos quienes escogemos con qué pecar. Cedemos solamente a aquellos pecados que nos gustan. Nadie cede ante un pecado que le disgusta. La gente puede odiar los resultados, puede odiar el caer,pero no se odia al pecado.
Al ser algo tan severo, debemos darnos cuenta de esta verdad. No podemos usar la gracia como una excusa para pecar. Aceptemos conscientemente la responsabilidad de nuestros actos. Dios es misericordioso y perdonador. No necesitamos entrar en temor, pero debemos aceptar nuestra responsabilidad. El temor solamente nos apartará de tratar adecuadamente con el pecado.
Laparadoja del mensaje de la gracia es: responsabilidad. Mucha gente acusaba a Pablo de alentar al pecado porque él rechazaba la ley y predicaba de la gracia, pero la verdad es que era totalmente lo contrario. La ley provee todo tipo de excusas para pecar.
La gracia, por el contrario, nos despoja de toda excusa. La persona que bajo el Nuevo Testamento cede ante el pecado, sólo puede admitirincredulidad o elección propia – ambas reducidas a una responsabilidad personal. Nada asusta más a la gente que la responsabilidad. Sin embargo, responsabilidad personal es el único camino hacia la libertad. La responsabilidad personal dice: “Debo creer en Dios y depender de su Santo Espíritu para hacer esto”.
La persona con mente natural (carnal) no puede relacionarlo como un tema de fe (justificación porla fe). Dicha persona no puede aceptar la justificación como un regalo gratuito porque mira a la justificación como una obra de la carne. El siguiente versículo explica el dilema de una persona que ve la justificación como un esfuerzo de la carne:
“Porque los que viven conforme a la carne, de las cosas que son de la carne se ocupan; mas los que conforme al espíritu, de las cosas del espíritu… Porcuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden, y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.” (Rom 8:5, 7-8)
El Espíritu Santo es contristado cuando rechazamos creer que somos justos y escogemos no caminar en justicia.
“Ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino...