Lic en periodismo

Decadencia de un espejo
En mi lindo país, hay muchos niños que en sus rostros se les dibuja con gran destreza un gesto doloroso cargado de insatisfacción, su semblante va acompañado de una miradaenlutada, entristecida he indecisa, con sus ojos se manifiestan gritando, su voz es distante y silenciosa , sacrificada tal vez por la ciega crueldad del abandono.
El confín de la apatía, silenciosa,potente de aquellos que de tiempo en tiempo les damos la espalda a esos infantes, es devastadora, profunda y dolorosa, eso es porque estamos envenenados con gran monto de indiferencia. Muchos de estospequeños se nos aproximan y nos dicen le limpio el vidrio de su auto señor, luego de obtener una respuesta negativa suya, mía, nuestra se retiran vencidos y lo que es peor sin su recompensa monetaria.Los humillados y excluidos chiquillos, renuncian a su niñez porque tienen que subsistir de manera propia, acreditándose cargas que no son de ellos, mantienen a sus padres, que les inculcan lamendicidad por trabajo, me imagino escuchar a esos malos padres decirles “hijo al trabajo, “a buscar billete”, hoy es sábado y nosotros necesitamos comer, y salen casi corriendo, esos hijos de la patria,sin desayunarse, a la faena diaria y ahí empieza su condena del exilio.
Estos expulsados, poco a poco se convierten en muchachos vagos, que recorren los alrededores de los bulevares de las ciudades queson sedes de los políticos y de los emporios económicos establecidos. Estos dos sectores hacen su tantísima voluntad.
Muchos de estos jóvenes han nacido de matrimonios conformados de dosalcohólicos, drogadictos o de dos seres que vivieron en un oscuro y cruel infortunio, y en el común de los casos, ni conocen a sus padres, estos malformados padrones, que de cierta forma solo ven la decadencia desus vidas en el reflejo de sus vástagos, que día con día están condenados por el sistema sociopolítico de esta gran nación a vivir en calamidad. No les damos tregua. Recuerdo con dolor y observo...