Licenciada en Historia y Geografía

La buena práctica ambiental en el biohuerto,
un aporte de los estudiantes de Ciencias
Sara Elisa Moreno Alberca
En el segundo semestre del año 2013, a partir del mes de setiembre, 39 estudiantes de la especialidad de Ciencia, Tecnología y Ambiente, VI semestre, del Instituto de Educación Superior Pedagógico Público “Víctor Andrés Belaunde”, asumieron el reto de reactivar el SAED (Sistemaagroecológico demostrativo) en sus componentes compostera y biohuerto en un área de 338 m2.
En un contexto de contradicciones generadas por los problemas referidos al limitado uso del SAED como escenario pedagógico para el desarrollo de actividades curriculares, el poco cuidado de las plantas así como la presencia permanente de basura en los caminos y áreas de cultivo, los estudiantescomprendieron la complejidad de la problemática y decidieron actuar.
Como en todo proyecto, fue relevante la organización de las dos aulas bajo un sistema de responsabilidades basado en el respeto, puntualidad, laboriosidad y compromiso con las tareas colectivas. Los grupos de trabajo fueron liderados por estudiantes con mayor emoción con la propuesta, saberes y experiencias de cómo funciona la naturaleza ylas tecnologías a aplicar.
Fue importante preguntarse ¿para qué? El propósito formativo del proyecto denominado “Organización para la producción de compost y hortalizas” se orientó a promover el manejo sostenible de proyectos productivos y la organización de los estudiantes en torno al trabajo colaborativo, fortalecer el cariño a la tierra e instalar la compostera y biohuerto haciendo uso detécnicas amigables con el ambiente.
Diversos testimonios de los actores coinciden en que el trabajo colaborativo y el contacto con la tierra y las plantas favoreció el desarrollo de aprendizajes actitudinales así como la aplicación de tecnologías en el cultivo de hortalizas y producción de compost. Señalan la importancia de la experiencia en su formación:
“Lo que hemos hecho es significativopor el esfuerzo, la responsabilidad y compromiso con la tierra” (Liseth); “evaluar el suelo para determinar qué tipo de plantas debíamos sembrar, confraternizar, trabajar en compañerismo y en equipo ha sido bueno para todos” (Yonsy); “nos ha ayudado como futuros docentes, ahora sabemos cómo se hace un biohuerto” (Marcia); “durante el trabajo en el biohuerto nos sentimos muy unidos con todos loscompañeros” (Kely); “hoy 6 de diciembre estamos cosechando el rabanito que es producto de nuestro tiempo y esfuerzo” (Diana); “espero que este proyecto no se quede acá nomás porque es muy importante para nuestra especialidad, con amor hemos preparado las camas para la siembra de coles, beterraga, zanahoria, pepinillo, culantro, frejol y el maicito también porque atrapa las plagas que le puedenatacar a las hortalizas, es un ecosistema donde vemos muchas interrelaciones entre el suelo, el agua, los rayos solares, las plantas, los insectos..” (Ester).
Sus apreciaciones son esperanzadoras en una sociedad donde lo individual se glorifica y nos dicen “no compartas”. En este orden de cosas cobra sentido que el aprendizaje para la vida sustentado en formar constructores de caminos que aprendenen interacción humana y con el contexto, desde las historias, experiencias y saberes de todos.
Fueron tres meses de intenso trabajo en los cuales se compartieron faenas de hasta dos veces a la semana, en ocasiones muy temprano por la mañana, Samy siempre muy puntual antes de la hora. El grupo liderado por Yonsy y Esther asumieron la instalación del aula ecológica con materiales de la zona, laque se convirtió en lugar de descanso y encuentro para realizar el asesoramiento, las coordinaciones y hasta las clases bajo la sombra de plantas de mango, naranja y guaba donde departimos muy a gusto.
Sin embargo lo más duro fue la limpieza del terreno, cubierto de la yerba “coco” bastante crecida, piedras, residuos; el chaleo y la remoción dejó encallecidas muchas manos. La instalación de la...