Los Factores Naturales En La Actividad Turística

3 - Los factores naturales en la actividad turística. (Turismo y geografía física)


3.1 - El cuadro natural y la atracción turística

Todo destino turístico se asienta sobre algún espacio, sea éste antropizado o no, y, en este sentido, algunos tipos de turismo, como el esquí o el alpinismo, exigen unas condiciones naturales muy precisas. En este sentido, conviene recordar la frase deLotazo-Giotart (1990; 38) que decía que el espacio puede ser considerado como la materia prima del turismo. Pero el mismo marco geográfico puede constituirse como el decorado de ciertas prácticas turísticas: desde ese momento, su contemplación puede convertirse también en un potente aliciente atractivo (sobre el paisaje como atractivo turístico, véase el capítulo 6).
El marco geográfico no sólorepresenta una de las bases necesarias para la constitución de un destino turístico: según la forma que éste presente, la actividad turística puede ser potenciada o no. Pero, en cualquier caso, el papel aislado del medio físico no debe pensarse como un factor determinante de la práctica turística. La tesis de Chadefaud (1987) resulta muy interesante en este sentido: lejos de cualquier determinismonatural, el papel del medio físico no es una realidad hasta que los agentes económico-sociales y algunos factores culturales preparan este destino para el consumo turístico.
En este sentido, estamos de acuerdo con Callizo (1991; 64) cuando afirma que “sólo cuando la sociedad industrial va alcanzando elevadas cotas de concentración demográfica en las áreas urbanas el medio natural comienza a servalorado para la práctica del recreo turístico”.
La historia nos muestra que el descubrimiento de la alta montaña y su conquista turística no se pueden desligar de la nueva imagen que ésta iba adquiriendo progresivamente a partir del siglo XVIII y de los distintos agentes que se enfrentaban a ella con nuevas miradas culturalmente producidas.
Por otro lado, los distintos usos de los espacioslitorales demuestran claramente que, ante la permanencia del medio físico, nuevos usos y nuevas representaciones de los mismos han dado lugar a “realidades” completamente diferentes: “de aquel turismo aristocrático, de invernada, hemos pasado a una heliofilia estival casi enfermiza” (Callizo, 1991; 64).
Ahora bien, culturalmente investidos de sentido o socialmente construidos, los espacios naturalestienen un atractivo para ciertas prácticas, atractivos innegables aunque aceptemos que estos varían históricamente de un momento a otro. Los espacios naturales, en contacto con formas culturales de representación, llegan hasta nosotros en forma de imágenes que nos atraen o rechazan, y de aquí su importancia para el estudio del turismo.
En este sentido, el bosque y la montaña han tenido unaevolución que los ha llevado a convertirse en algunos de los lugares más apetecibles para la práctica del turismo, cuando, durante la edad media, eran vistos como lugares inhabitables o peligrosos. Su descubrimiento práctico, así como las nuevas representaciones que la cultura occidental les ha asociado des del Renacimiento, han hecho que estas realidades ambientales, presentes hace milenios en nuestraslatitudes, adquirieran nuevos valores y permitieran nuevos usos. Así han nacido los deportes de montaña o de invierno, junto con otras formas turísticas vinculadas al contacto con el medio natural, del ecoturismo al turismo de aventura.
El caso concreto de los cañones de montaña nos muestra como, formados millones de años atrás, fueron ignorados hasta hace un par de décadas. Actualmenteconstituyen uno de los recursos naturales que más ha contribuido al desarrollo de ciertas regiones españolas. Es el caso, especialmente, de la Sierra de Guara (Huesca), un espacio abocado a la despoblación y al abandono hasta el descubrimiento de la potencialidad de las entrañas de sus macizos calcáreos.
Un caso parecido lo encontramos en los grandes embalses, aunque en este caso nos enfrentemos a...