Los Nuevos Subditos

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS
“Año del Centenario de Machu Picchu para el Mundo”

“LA DOMINACION DE LAS MASAS EN EL GOBIERNO FUJIMORISTA”

Ciudad universitaria, julio del 2011.

INTRODUCCION
EL OTRO QUE NO EXISTE
En este texto de Ubilluz nos presenta la cara del Fujimontecinismo, pero no esa cara que todos conocemos,sino nos presenta al Fujimontecinismo como causante de muchos pensamientos sociales que se han desarrollado en nuestra sociedad. Intenta llenar un vacio en la conceptualización de los sucesos de la década pasada.
Para empezar Ubilluz parte desde una teoría como es la declaración de la muerte. En los siglos XIX y XX, Nietzsche proclama la muerte de Dios, hablando simbólicamente Nietzsche comparaa Dios con el capitalismo, que trae consigo la muerte social, el capitalismo es la autoridad para decirle quien es y quien debería ser. La sociedad es representa por EL OTRO es decir el suprimido. Pero con esto es evidente que hay principios y normas que rigen nuestra vida social y que por más individualista que nos parezca la gente de hoy, pocos son los que en verdad actúan de acuerdo a lasingularidad de su deseo.
La hipótesis de este libro es que en la actualidad la existencia del OTRO es suplida por aquel Dios. Por un orden narcisista en el que el yo se eleva al estatuto del objeto digno de amor y el otro decae al estatuto del rival. Enlazado al capitalismo, este orden imaginario (orden del yo) conduce al sujeto hacia el cinismo y la perversión.
El cinismo y la perversiónno son posiciones existenciales que garanticen o faciliten el ejercicio libre de la subjetividad, sino que, por el contrario, ellas hacen del sujeto de un yo-súbdito de una voluntad ajena, la voluntad del mercado.
Sin embargo debemos ahondar en como la modernidad y la posmodernidad han modificado la relación entre el sujeto y el nombre del Padre, el significante de autoridad que soporta elgran otro.
Al declarar la muerte de Dios, Nietzsche hace eco a sus propios asertos relacionados a la muerte del amo, el filosofo alude al eclipse de la confianza en una voluntad trascendente capaz de dictar un sentido a la existencia social. La muerte de Dios se refiere al fin de la autoridad religiosa, pero también al fin de la monarquía absoluta sostenida por la voluntad del rey. En estademostración Dios y el rey encarnan el Nombre del Padre.
La muerte de Dios pone fin a la invocación al amo y de este modo inaugura la modernidad, época que retira su confianza del dogma o de la palabra del Rey. No es que en la modernidad el esclavo destituya al Amo: es solo que el esclavo ahora exige un amo que se justifique ante él mediante el conocimiento racional-científico. A diferenciadel amo antiguo, el amo moderno no puede autorizarse de su nombre. Y si desea conducir a la humanidad al progreso, el nuevo amo deberá hacerlo en Nombre de la razón.
Por otra parte la modernidad implica la progresiva emergencia del concepto del individuo autónomo, indiviso, independiente de la voluntad que representa a la comunidad. Con la muerte del amo, la cadena de ritos y metascolectivos pierde consistencia y el hombre empieza a concebir y a afirmar su derecho a hacer con su vida lo que él quiera. En la actualidad en una época de un mundo moderno se puede decir que hay dos tipos de hombre; el primero es el individuo autónomo, autosuficiente, sin falta, el sujeto que se relaciona directamente con su objeto de goce sin necesidad de su semejante. El segundo es el individuo quese inmola en nombre de los ideales de alguna secta fundamentalista. No debe pensarse que la secta es un fenómeno pre moderno. En tanto moviliza al sujeto al pasaje al acto suicida en nombre de la voluntad de un pequeño gran Otro, la secta le permite eludir la angustia ante la inexistencia del gran Otro universal sin renunciar al imperativo al goce capitalista.
Podríamos decir en conclusión...