Macroeconomia
Susadversarios más modernos, algunos con la furia compulsiva de los conversos, sólo estarían dispuestos a reconocer hoy día que Keynes llevaba únicamente razón cuando afirmaba que a largo plazo todos muertos;más que nada, para reafirmar así que Keynes ha muerto, la expresión un poco vulgar que tan a menudo se ha convertido en el único argumento para justificar, unas veces, el cambio de bando intelectual,y otras la bondad de las posiciones teóricas contrarias a las que el economista inglés defendió con mucha más brillantez a lo largo de su vida. Si se coteja la literatura económica en toda suextensión y no sólo la que se circunscribe al liberalismo redivivo, quizá habría que afirmar respecto al lord británico, como en el Tenorio, que los muertos que vos matásteis gozan de excelente salud.
Perosi nos referimos sencillamente a su influencia sobre las políticas económicas que se llevan a cabo en los últimos años o sobre la intelectualidad más relevante que marca las pautas de lo que debe serlo teóricamente correcto en la teoría y en la política económica habría que concluir sin el menor atisbo de duda que el keynesianismo no es sino una parte del patrimonio más olvidado del pensamientoeconómico.
Por otra parte, si se deja de lado la influencia puramente intelectual de Keynes y llevamos nuestra atención a las prácticas gubernamentales, con independencia de la filosofía que las...
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