Marxismo britanico

Cualquier recorrido por las principales tradiciones historiográficas del siglo XX tiene como parada incuestionable
la obra de los llamados “historiadores marxistas británicos”. Así
como
Annales
se convirtió en paradigma del quiebre con la historiografía tradicional desdeFrancia, Dobb, Torr, Hill, Hilton, Hobsbawm y Thompson representaron también unaruptura con esa forma de pensar y hacerhistoria, esta vez desde Inglaterra. Sin embargo, para aprehender en su totalidad esta tradición
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, debe tenerse en cuenta asimismo unasegunda discusión protagonizada por este grupo de historiadores, que tiene como escenariola tradición marxista. Así, la obra de E.P. Thompson, encuadrada en dicha tradición,aparece como un ejemplo de este doble debate. En palabras de Thompson:
El libro estáestructurado en una crítica de doble vertiente: por un lado, de las ortodoxias positivistasque entonces dominaban las escuelas de historia económica más conservadoras: ortodoxias que
últimamente se venden bajo el nombre de „teoría de la modernización‟; por el otro, de una ciertaortodoxia „marxista‟ (cuya influencia disminuía por aquel enton
ces en este país), que creía que laclase obrera era lacreación, más o menos espontánea, de las nuevas fuerzas productivas y relacionesde producción.
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Este breve ensayo tiene por objetivo realizar un breve análisis de ambas rupturas tomandocomo punto de referencia la citada obra de E.P. Thompson y rastreando en ella los indiciosde ambos debates. Para ello, el análisis constará de tres partes: en primer lugar, unacontextualización histórica ehistoriográfica, seguida de un apartado que buscará analizar laruptura con la historiografía tradicional así como la delimitación de esta tradición conrespecto al movimiento que representan los historiadores franceses de
Annales
, finalizandocon una tercera sección dedicada a los debates dentro del marxismo y sus resonancias en laobra del historiador británico.
1. Para un análisis historiográfico deLa formación de la clase obrera en Inglaterra
El marxismo británico es la otra gran corriente historiográfica, junto con los historiadoresde
Annales
, de mediados del siglo XX. Si bien había surgido de forma muy embrionaria en
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La elección de la palabra “tradición” no es accidental. Más adelante se expondrán los argumentos, centrados
en la obra de Harvey Kaye, que justifican su uso.
2Thompson, E.P.
La Formación de la clase obrera en Inglaterra
. Barcelona, Crítica, 1989, Prefacio a laedición de 1980, pp. XIX.


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el período de entreguerras, su afianzamiento se dio en los años de la segunda posguerra. Elmundo académico británico tenía entonces algunas particularidades de las que es precisotomar nota a la hora de emprender el presente análisis: se encontrabaaltamentecentralizado, tenía un carácter profundamente elitista y se movía en un ambiente intelectualsumamente tradicionalista. De esta forma, se practicaba en Gran Bretaña una historiaesencialmente política y metodológicamente conservadora, donde la llamada interpretación
whig
de la historia tenía un peso fundamental. A principios del siglo XX surgen las primeras impugnaciones a esa tradición,tanto desde el conservadurismo como desde loscírculos
liberales

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en sentido británico-, entre los que cabe destacar los trabajos de losWebb y los Hammond. Sin embargo, estas críticas serán minoritarias y no alcanzaránmucho peso en los ámbitos académico
s hasta la década del ‟60, cuando un grupo de
historiadores comunistas construyan un modelo teórico alternativo capaz de disputarlahegemonía que ostentaba hasta ese entonces la historia tradicional en Inglaterra.En este punto se hace necesaria una aclaración: la asimilación de la tradición del marxismo británico con los historiadores de
Annales
no debe conducir a pensar a estas dos formas dehacer historia como dos variantes geográficas de una misma construcción historiográficaalternativa. Si bien ambos movimientos buscan la...