Masoquismo

Ella llego a casa. Ella no estaba igual, ¿Qué le había pasado?, solo se sentó en el sofá que, en la posición que se hallaba, mostraba una visión panorámica de la habitación.
La casa era rustica.Piso de madera, rechinando porque no había nada bajo que la sostenga, paredes con tapices descolgados y humedecidos con un poco de moho, cuadros chuecos y despintados… un desastre. La casa, durantetanto tiempo ha pasado por demasiados descuidos, nadie la limpiaba, nadie le prestaba la debida atención, nadie… absolutamente nadie hacia algo por ella.
Se le presento el fantasma de los recuerdos. Lavisión le fallaba y eso hizo que viera la casa como lo que era años atrás. Tomo un brillante color dorado, candelabros de cristal, piso muy pulido, una casa espectacularmente bella. Era la casa quetodos amaban, aunque era muy costosa, casi inalcanzable, todo dependía del propietario que la tomaría como responsabilidad suya.
La morada fue posesionada por un afortunado. Puedo decir que alsentir que esa estupenda casa era de su sola propiedad todo se volvió rutinario, todo monótono. La mayoría de las veces recibía basura de su dueño, las reuniones que organizaba con sus más degeneradosamigos, cuántas noches solo de pasión se veían con mujeres que intentaban sustentar el sueldo que se requería por sus servicios personales, cuantas borracheras y humaredas soporto esa hermosa casa hastaconvertirse en lo que ahora es.
La mujer que seguía viendo el interior del hogar se encontraba llorando, llorando porque sabía que ella le podía dar un mejor cuidado, llorando porque todo lo que sele presento eran nada más que inoportunos contratiempos para pasmar su bienestar en dicha valiosa mansión… ahora solo quedan las ruinas.
Ella no escogió esto, estoy seguro que ella podía hacer máspor ella. Esa descuidada casa era en verdad el reflejo del interior de esa mujer, sentada, sin rumbo, golpeada en toda ella, mental y corporalmente. Esos desmanes le creaban ademanes de impotencia,...