MERCADO UNILATERAL DOMINICO HAITIANO

MERCADO UNILATERAL DOMINICO HAITIANO
República Dominicana tiene que hacer todo lo posible para que Haití se desarrolle. Para que recupere la fertilidad del suelo. Para generar empleos en su propio territorio. Para consolidar la seguridad alimentaria de toda la isla. Y para que, al trillar la senda del desarrollo, nuestra producción se especialice y se complemente.
En el discurso inaugural delPresidente Danilo Medina quedó claro que la prioridad de su gobierno será fortalecer las relaciones con los países circundantes: el Caribe, Centroamérica y el resto de América Latina. Mencionó además específicamente la necesidad de estrechar aún más las relaciones comerciales dominico-haitianas, quizás incluso a través de un tratado de libre comercio.
Inmediatamente el Presidente Martellyreaccionó en una entrevista en la prensa escrita, en el sentido de que el libre comercio requería manejarse con cuidado, por lo que esperaba que la Comisión Mixta Bilateral Dominico-Haitiana se sentara a discutirlo y a examinarlo con atención.
La política comercial haitiana quedó severamente comprometida en la década de los 1990 cuando, por presión de los organismos internacionales, fue sometida a unaapertura unilateral que la dejó con muy bajos aranceles. Entonces, ¿para qué negociar libre comercio con un país con aranceles ya tan reducidos?

La realidad es que pese a la firme voluntad de fortalecer la gobernabilidad en Haití, todavía persisten procedimientos poco uniformes de valoración aduanera en sus distintos puntos fronterizos, situación que se agrava por la necesidad urgente deincrementar sus ingresos tributarios.
Así, se requieren procedimientos uniformes en la gestión del comercio dominico-haitiano. Procedimientos que ya están consignados en el Acuerdo de Asociación Económica (EPA) suscrito por República Dominicana, Haití y todos los demás miembros de la Comunidad del Caribe (CARICOM) con la Unión Europea en octubre de 2008. Serán esos los procedimientos que agilizarán elcomercio dominico-haitiano, haciéndolo más libre.
Pero ¿para qué aspirar a un comercio más libre? ¿Será acaso el libre comercio un fin en sí mismo o, por el contrario, debería ser un medio para un propósito más importante y urgente?
En los más de 15 años que llevo trabajando el tema de las negociaciones comerciales, la República Dominicana, junto a otros países de la región, ha promovido que elobjetivo sea el desarrollo económico a través del comercio. Esa visión quedó plasmada por vez primera en el EPA que nos vincula a caribeños y europeos.
Tanto el Canciller dominicano Carlos Morales Troncoso con su Vicecanciller José Manuel Trullols se encuentran convencidos del contexto ideal que representa el EPA para nuestro diálogo comercial con Haití. No sólo por sus claras disposiciones enmateria de valoración aduanera y medidas de facilitación del comercio, sino por su clara orientación desarrollista, complementada por el generoso financiamiento europeo para el ajuste estructural de nuestras economías durante la larga transición hacia la liberalización comercial. Y, sobre todo, por la membresía en el EPA de socios confiables y creíbles como lo son la Unión Europea y sus EstadosMiembros, quienes ofrecen a Haití apoyo financiero, asistencia técnica y un incuestionable compromiso con la estabilidad política, el imperio de la ley y el fortalecimiento de la gobernabilidad.
Promovamos así la utilización del EPA para el desarrollo económico haitiano. Pues será sólo mediante el desarrollo haitiano en que se generarán empleos para los haitianos en su propio territorio.
Porquedesarrollar Haití para generar empleos en Haití requiere recuperar la fertilidad del suelo. Aparte de los devastadores efectos que tuvo sobre la agricultura haitiana la apertura unilateral de los años 1990, el suelo haitiano se encuentra severamente degradado, resultado de las prácticas ancestrales de tumba y quema. Erosión que se acrecienta por la producción de carbón de leña mediante la tala de...