mio noiu
HOMBRES POR LA IGUALDAD
Por otro lado, cada vez son más visibles, especialmente en las sociedades occidentales,
diferentes formas de ser hombre que rompen con elantiguo mandato de dureza y poder,
constituyendo lo que puede entenderse como un movimiento masculino de liberación, como
en su día lo fue la liberación de las mujeres con respecto a un papel social prescrito por la
cultura. De forma tímida pero contundente están apareciendo en España las primeras
asociaciones de hombres por la igualdad
“Los hombres somos como archipiélagos, islas separadaspor aquello que nos
une: la masculinidad” (D. Leal, P. Szil, J. A Lozoya, L. Bonino, 2003)
A mediados de la década de los 70 del siglo XX aparecieron en Estados Unidos y en los países
escandinavos los primeros grupos de hombres para reflexionar sobre la condición masculina,
aunque en España, los primeros grupos aparecen en Valencia y Sevilla alrededor de 1985. Pero
es en 1999 cuandoencontramos el primer programa permanente desde una administración
pública: el Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz). Y en el 2001 surge la primera
Asociación de Hombres por la Igualdad: AHIGE.
Por su parte será en 1995 en la Declaración de Beijing cuando se aconseje explícitamente
“Alentar a los hombres para que participen plenamente en todas las acciones encaminadas
hacia laigualdad”. En esta línea, en 2005 en la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social
de la Mujer (CSW) de la ONU, se recoge el informe denominado “El papel de los hombres y
Niños en el logro de la igualdad de género” que fue presentado por Kofi Annan, Secretario
General de las Naciones Unidas, a la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer en
marzo de 2004.
En opinión de ciertosautores “cada día es más clara (al menos para las mujeres) la necesidad
de incorporar a los hombres al proceso por la igualdad entre los géneros. Para los hombres,
esta incorporación es importante y asumirla nos plantea la necesidad de cambios. Lo que
hemos hecho hasta ahora: Asumir la masculinidad hegemónica y sus valores –varios de ellos
desigualitarios y humanamente empobrecedores-; yreproducirla en nuestro comportamiento
cotidiano. Masculinidad que nos reporta privilegios de partida, pero a costa de las mujeres y de
nosotros mismos” (D. Leal, P. Szil, J. A Lozoya, L. Bonino, 2003). Como estos autores
afirman, “entre los inconvenientes que la desigualdad plantea destacan especialmente: la
imposibilidad de una relación igualitaria y de equivalencia con las mujeres, y lahomofobia
como mandato, que entorpece la amistad profunda y cercana entre los hombres. Superar esta
situación requiere de los hombres una reflexión autocrítica y para ello los grupos pueden ser un
buen instrumento”.
A la pregunta que ellos mismos se hacen de ¿qué son los grupos de hombres igualitarios?, la
respuesta es clara y concisa:
“Algunos hombres estamos hartos de ser el hombre...
Regístrate para leer el documento completo.