Naturaleza del desarrollo infeccioso del sida
Lo detesto, podría incluso decir que loodio. La paz está diseñada para nosotros, no para ellos. En ningún momento para ellos, qué asco me da imaginarme de la mano con alguno de ésos. Ya con mirarles a la cara y aceptar que vivimos en elmiso mundo es suficiente. Qué asco, qué indigno. Mis canciones no son para ellos.
Hitler estaba bien, sólo tenía algunos enfoques incorrectos. Ojalá hubiese tenido la oportunidad de conocerlo, asíhubiese podido convencerlo de que nosotros somos los que estamos bien, nosotros pensamos en el futuro, no ellos… después de convencerlo y usarlo a mi favor, hubiese matado al hijo de puta, como lo hicecon Marylin y Kennedy. Todos ellos, les toca a ellos caer. Tendrán lo que están buscando, todos ellos, lo que se merecen.
¿Me ven la cara de idiota? ¿Creen que somos iguales? Yo jamás creeré talridiculez. Ésa es la verdadera armonía, la verdadera felicidad es exterminarlos a todos. A todos, todos. El contrato no me permite segregarlos, pero juro que cuando veo a alguno de ésos en mi público medan ganas de dejar de cantar y matarlos uno por uno. Ojalá esta noche no haya tantos, ojalá no haya ninguno.
Están todos esperándome. Qué tristes los ingenuos pacifistas que creen que los aceptamos ennuestra causa, pero bueno, debe parecer que somos más. Patéticos, asquerosos, cuando esto acabe y yo triunfe no quedará ni uno solo vivo.
Mi público ya está esperándome, es la hora. Que cada nota quecante sea un mensaje de consciencia para nosotros, para los que sí valemos algo. Valemos mucho, valemos todo, de hecho. Ellos, nada. Mi guitarra está afinada, a escena.
Están esperándome, ojalácrean todas min mentiras y algún día podamos llegar a la victoria, lo haremos. Ya llegó su hora y por fin llegó la nuestra. Es ahora, míralos a todos, me creen.
-… Imagine all the people…
-… ¡Yo tengo...
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