Organizaciòn Social Y Salud

Sistema endocrino y ejercicio.
Sistemas fisiológicos y psicológicos reguladores de la demanda y gasto de energía trabajan sinérgicamente para mantener el tejido adiposo, pero el tejido adiposo no es un elemento pasivo en este proceso. Leptina, catecolaminas, cortisol, insulina, hGH, hormonas tiroideas y sexuales, tiene efectos sobre el metabolismo lipídico. Además el tejido adiposo libera citoquinas que pueden afectar sobre la insulina, incrementando la lipólisis y estimulando el sistema para liberar cortisol. El tejido adiposo actúa sobre numerosos estímulos fisiológicos, incluyendo hormonas, y al mismo tiempo, es un componente activo en la regulación de su propio contenido de grasa a través de varios mecanismos hormonales de retroalimentación.

Todas estas hormonas mencionadasresponden al ejercicio y están de algún modo relacionadas entre so. Así el ejercicio es uno de los mayores vínculos entre los moduladores hormonales de toma y liberación de energía. Parece que la clave de cómo los componentes neuroendocrinos estimula la actividad lipolítica durante el ejercicio son el SNS y las catecolaminas. Estos dos estímulos tienen un efecto directo sobre el metabolismo lipídico yun efecto directo sobre las hormonas metabólicas, las cuales influencian dicho metabolismo. El ejercicio de baja y media intensidad provocan cambios hormonales que facilitan la actividad lipolítica, mientras que el ejercicio prolongado parece reducir esa respuesta hormonal, pero incrementa la sensibilidad de estas hormonas por lo que la lipólisis se ve favorecida. Grandes cantidades de tejidoadiposo parecen bloquear la respuesta hormonal metabólica del ejercicio, pero la sensibilidad de estas hormonas ante el ejercicio parece incrementar. Aunque la influencia de estas hormonas durante el ejercicio puedan no ser tan significativa como otros cambios fisiológicos que ocurren durante el entreno, como la entrega de oxigeno y los cambios mitocondriales. No obstante, aunque el role fisiológicodel sistema endocrino durante el ejercicio y entreno es significante, otros efectos del entrenamiento parecen tener más influencia sobre la actividad lipolítica en el tejido adiposo.

Existe una relación inversa entre el metabolismo lipídico durante el ejercicio y la intensidad del ejercicio. Sesiones cortas e intensas causan una elevación en la mayoría de las hormonas, mientras que elentrenamiento prolongado disminuye o no afecta a la concentración hormonal. El incremento hormonal en relación los ejercicios cortos e intensos tienen la propiedad de promover la oxidación de lípidos y la lipólisis, asumiendo un correcto aporte de oxigeno, aunque el descenso en la concentración hormonal asociado a él entreno aeróbico también resulta en una mayor utilización de lípidos.

El ejercicio debaja intensidad (<30% VO2max) usa predominantemente lípidos lo cual parece ser debido a la disponibilidad del oxigeno, el reclutamiento de fibras lentas y a la capacidad de la mitocondria para transportar y metabolizar. Además el ejercicio de baja intensidad no parece causar significantes cambios en la mayoría de las hormonas, a menos que la actividad se prolongue y cause una disminución en laconcentración de glucosa.
El ejercicio moderado (40-65% VO2max) también consume una cantidad importante de grasa como energía, pero la fuente ahora será tanto el tejido adiposo como los depósitos intramusculares. A esta intensidad, las catecolaminas se elevan, activando la HSL, se eleva la hGH, facilitando el efecto de las catecolaminas sobre el metabolismo lipídico. El SNS actúa reduciendo lainsulina y aumentando el glucagón. Además, el hipotálamo libera CRH causando una elevación de cortisol. Estos cambios hormonales facilitan el metabolismo lipídico hasta el punto en el que la energía demanda supera la disponibilidad de oxigeno.

El ejercicio de alta intensidad (>70% VOmax2) sigue haciendo uso de pequeñas cantidades de grasa para producir energía, pero la glucosa y el glucógeno...