Parcial 1 Comu y Educ 1er Cuatri 2013 Carli

1 a) Uno de los territorios del campo de la Comunicación y Educación de los cuales Jesús Martín Barbero se preocupa y considera estratégicos es el de los “desórdenes que atraviesa el saber”1. Siguiendo a Castells, considera que el nuevo modo de producir se asocia con un modo nuevo de comunicar, dando como resultado la transformación del conocimiento en una fuerza productiva más. Esto ocurreporque ha cambiado radicalmente la capacidad tecnológica de utilizar la característica propiamente humana de “procesar símbolos”2. El intelectual es ahora el experto, “el analista simbólico: aquél que trabaja en el procesamiento de símbolos” utilizables como fuerza productiva. Los profesionales y sus investigaciones se hallan integrados a la noción de servicio, donde el mercado espera y demanda laformación de investigadores e intelectuales capaces de producir, utilizar y aplicar conocimientos para identificar, resolver y administrar problemas.
De esta reubicación socio-económica del saber, el autor traza tres ámbitos de descentramientos. El primero, se articula cuando la razón moderna pasa a ser factor de riesgo y peligro para la sociedad y el planeta. La Razón se transformó en “El” ordenper sé (un orden diferente es des-orden), en vez de ser el objeto del pensar. La razón clasificó, separó y transparentó el mundo, nos sacó el malestar y la inseguridad de la ambivalencia de la vida. Al intentar reducir esta última a un problema de descubrimiento y aplicación de la técnica adecuada, multiplicó y fomentó los riesgos. Este círculo vicioso y paradójico pone en jaque el rol del saber yde los expertos, a quienes se les confió la resolución de los problemas de la vida pero hoy generan temor, riesgos y dilemas éticos.3
El segundo descentramiento es por un cambio radical: las máquinas, antes delimitadas espacialmente del cuerpo, hoy son híbridos, mixtura. Lo que ahora trabaja como dimensión propiamente humana de la producción es una “aleación entre cerebro e información”4, que daun nuevo tipo de saber. Esta tecnicidad establece una mediación estructural de las tecnologías digitales a la hora de producir conocimiento, cuya contracara fundamental para la educación es la re-incorporación de la imagen al proceso cognitivo. Extraída del mito de lo falso y engañoso, se reúne en los ámbitos educativos con la abstracción y la argumentación propias del proyecto racional moderno.El tercer descentramiento es la des-ubicación y des-centramiento del saber de su “doble confinamiento”: la escuela y el tiempo del aprendizaje escolar. Una nueva gama de saberes y los más importantes y socialmente valiosos, ya no se tamizan por la escuela para circular. El texto electrónico une la separación fundante de la modernidad entre razón e imaginación, y descentra la cultura occidental desu eje letrado. El libro coexiste y compite con su par digital, con nuevas disposiciones visuales y espaciales de la información, formatos, modos y tiempos de lectura-apropiación.
Barbero postula evitar planteos apocalípticos y éticas dudosas que los descentramientos instauran, y poner en perspectiva histórica y reflexionar sobre los cambios y las capacidades propias de la modernidad y susproyectos, que se salen de sus objetivos de emancipación y realización de la vida humana.5 Relativo al tercer punto, propone “hacer estallar la escuela”, para transformar los modos de estar juntos y los nuevos modos de comunicar que las máquinas híbridas y los hipertextos habilitan. En ese estallido se juegan la creatividad y la participación. Creatividad es “capacidad de innovar”6 en el conocimiento,el arte, la ciencia o la tecnología; ensanchar los modos de percibir y articular la intuición con la lógica, la imaginación científica y la estética; y alentar la reflexión necesaria para vigilar el porqué y el para qué de los saberes y experimentos. Y si participar es “compartir la acción con otros”, la escuela está por entero llamada a convertirse en el lugar de recreación y re-imaginación...