Pensamientos Innecesarios.
Son las 6: 30 de la mañana, lunes. Mi pelo estáalborotado y mis ojos reflejan el sueño de esa noche, del que solo recordaba pequeñas partes confusas de él, y era demasiado temprano como para quebrarme la cabeza pensando en cómo era. Son las 8: 30 dela mañana, empiezan las clases. Mi mente estaba en blanco y solo unas imágenes que no conseguía recordar llenaban ese espacio que, se suponía tenía que llenar con el teorema de Pitágoras. Son las 9: 30de la mañana, me acordé. Un recuerdo incierto, un parpadeo, fue acto reflejo, lo miré. Él estaba en mi sueño, y si hubiera sabido lo que me perjudicaría acordarme de ello, hubiera atendido a la``interesante´´ clase de Sociales que me tocaba en ese momento. Son las 10: 30 de la mañana, dulce indiferencia, ¿a dónde has ido? Mirarle de reojo me hizo darme cuenta de que se asemejaba bastante a ungato, extrañamente lindo. En ese momento giró la cabeza, y me vio. No, no solo eso, se dio cuenta, pero ¿de qué? Son las 11: 30 de la mañana, no acepto absurdos. Le conté lo sucedido a mi mejor amiga,pero su respuesta solo hizo que me diera dolor de cabeza, era ridículo, inesperado y terriblemente confuso. Me gustaba. Era algo que no me entraba en la cabeza, algo de lo que no quería hablar, nitener conciencia de ello. Son las 12: 00 de la mañana, resignación. Pensé en no mirarlo, en pasar de él como había hecho desde que empezó el curso, así que no podía ser difícil. Nunca me canso deequivocarme. Mi tentación era indiferente a lo que deseaba, por lo que no tuve otra opción que hacer caso a los que mi voluntad no podía afrontar. Son las 13: 00 de la mañana, mi salvación. Íbamos a hacer unexamen de Biología a esa hora y aunque me resulte extraño, estaba feliz por ello ya que estaría tan concentrada en el examen que no tendría oportunidad de fijarme en él. Por una vez no fallé en lo...
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