Perros en cali

Las alteraciones del orden público, los enfrentamientos de grupos de estudiantes con la fuerza pública, y en general, las manifestaciones violentas como forma de expresión política, han sidoconstantes en la historia de la Universidad del Valle como institución educativa. Las tensiones sociales, y el conflicto armado que ha sufrido Colombia en las últimas décadas, de forma inevitable han permeadola vida universitaria; el debate político, que en muchas ocasiones adopta formas democráticas al interior de la universidad, en otras se deforma en acciones violentas que sin duda han tenido unosgrandes costos humanos, económicos y sociales.
Son múltiples los eventos, sólo en la última década, en los que estudiantes y miembros de la policía nacional han sufrido daños en su integridad física,producto de los disturbios ocurridos en la Universidad del Valle, en particular, en el campus de Meléndez. La muerte de Jhonny Silva Aranguren, estudiante de Química de la Universidad del Valle, enseptiembre de 2005, producto de un impacto de bala durante una revuelta estudiantil, es quizá el hecho más paradigmático, no obstante están documentados múltiples incidentes con estudiantes queresultaron gravemente heridos por la utilización de elementos explosivos o por la actuación excesiva de la fuerza pública, resultando en algunos casos en la pérdida de extremidades o en otras secuelas graves.Estos costos humanos son por supuesto la dimensión más preocupante de estos hechos violentos, no obstante dista de ser la única, los daños a la propiedad pública, especialmente a la infraestructurauniversitaria, a la propiedad privada en las zonas aledañas, la interrupción de actividades académicas y administrativas, así como del flujo vehicular en la zona, son algunas de las consecuencias másevidentes de estos episodios violentos, conocidos en el argot universitario como “tropeles”. De esta forma, no solo la comunidad universitaria ve interrumpidas sus actividades normales, sino que el...