poesia y cuentos

La huella de la novia en la luna de Octubre



Luna nueva

ATENCIÓN
Se rentan tres cuatros cómodos.
Ubicación excelente. Calle Lumen
y Garibay # 486. Independencia
garantizada. Interesado acudir
a partir del 8 de octubre.
P.T.S.

RECUERDO bien, llegué por el tiempo de las lunas de octubre. El lugar era amplio, justo lo que buscaba, algunas remodelaciones pero nada especial.Desde el momento en que entré en la casa, supe donde pondría mi estudio. Una sola planta pero con bastantes habitaciones. ¿Para qué puedo querer sala y comedor para mí solo? Cinco cuartos y un jardín en la parte posterior. Puedo rentar tres habitaciones. Siempre hay alguien que necesita un lugar donde vivir.

cuarto creciente

Van dos días desde la publicación del anuncio y no ha venido nadie.¿Será porque no hay teléfono? Pongo música pero no me decido si algo actual o pasado. No creo que para mi estado de ánimo sea importante. Lo que sea. Me preparo un clamato y encuentro una lata de almejas de Ensenada, que me regalaron el día de mi cumpleaños. Vacío una parte a mi vaso para hacerlo más natural.
Ya tendría que estar escribiendo el próximo ensayo, “La repercusión de la ideologíafáustica en la sociedad moderna” pero no tengo un esbozo siquiera del asunto. Debería de desechar la idea. Camino hacia la puerta que conduce al jardín cuando tocan en la entrada principal. Toc, toc, toc. ¿Por qué no tendré a una persona que me ayude? Debo analizarlo. Abro la puerta y me encuentro con tres mujeres y sus respectivas maletas. Las tres (y me refiero a ellas de esa manera antes desaber sus nombres) mostraban cierta tranquilidad, aunque la de menor edad tenía un dejo de ansiedad por saber si había llegado a tiempo, digamos que la edad intermedia con un poco de impaciencia, tal vez sea por el calor de la calle, mientras la mayor (observación: las tres eran jóvenes) supo que llegó y eso le bastaba.
-Venimos por lo del cuarto-las tres al mismo tiempo o una tomó lapalabra, eso no lo recuerdo bien.
-¿Se conocen? ¿Vienen juntas?-pregunté al tiempo que las hacía entrar a la casa.
Me respondieron que ¡No! Cada una por su lado y dio la casualidad que se encontraron frente a la puerta en el mismo instante. Querían saber si todavía quedaba una habitación desocupada. Yo les dije que las tres. Que nadie las ha rentado aún.
-Si quieren pasar averlas, acompáñenme.
Y me siguieron quedando un poco consternadas, porque un hombre fue el que puso el anuncio. Pero ya platicando y haciéndome de su confianza, entendieron y aceptaron el vivir conmigo (¿conmigo?)
De nombres algo extraños: Oli, la menor de las tres. Artista plástica. Yan, la de en medio. Estudiante y en la búsqueda de su ascendente astrológico. Issa, la mayor.Maestra.
Al día siguiente contraté a una señora que se encargara de limpiar y de hacer la comida. Ya podía escribir sin tener que abrir la puerta.

Una noche, cuando todos estábamos dormidos y yo en sueño profundo, sentí la presencia de una persona, abrí los ojos y estaba frente a mí, Yan. Viéndome. Me sobresalté, mi ritmo cardiaco se aceleró.
-Vine a despertarte para que meacompañes a tomar un baño de luna-dijo Yan.
-¿A estas horas y precisamente hoy? Por qué no despiertas a las muchachas. Te aseguro que les encantaría la idea-dije todavía asombrado.
Me sacó de mi cama como un guiñapo, me condujo al patio trasero de la casa, donde extendió unas colchonetas y empezó a explicarme la teoría de los rayos lunares, cómo afectaban al humano y sus vibracionespositivas. Yo, semidesnudo, elevando mis ojos al cielo, suplicantes, que la noche terminara ya. Ella por mientras chapoteando y revolcándose en las aguas impetuosas que caían de los rayos lunares a pesar de que apenas titilaban las estrellas por la excesiva nubosidad que había dejado el paso del huracán “Víctor”.
Desperté entumido en el jardín como a las siete de la mañana con algo de...