Populismos En Comparacion

El carácter transicional de la década de 1930 en América Latina la transforma en un momento clave de la historia del continente. Waldo Ansaldi analiza este período y resalta que, a pesar de que no pueden despreciarse los cambios producidos durante el mismo, tampoco deben ser sobrevalorados . La crisis económica que comenzó en Estados Unidos en 1929 afectó a toda América Latina, combinándose concrisis sociales y políticas. Frente a la crisis económica, los modelos agroexportadores tuvieron que ser replanteados a partir de la disminución de la demanda externa. Aunque las respuestas frente a esto variaron en los distintos países, comenzaron a implementarse medidas intervencionistas. A su vez, frente a la crisis política, surgieron diversas respuestas que implicaron un cambiofundamentalmente en la forma del Estado, por ejemplo, los llamados gobiernos populistas. Una visión clásica relacionaba de manera automática la crisis del modelo agroexportador y del régimen oligárquico con la instalación de estos gobiernos y su modelo de intervencionismo estatal. Sin embargo, tal afirmación es matizada por el autor y puede ser puesta en duda al analizar y comparar los procesos que tuvieron comoprotagonistas a Lázaro Cárdenas en México, Getulio Vargas en Brasil y Juan Domingo Perón en Argentina. En primer lugar, cabe destacar las diferencias en cuanto al proceso de gestación de dichos movimientos. Mientras que en Brasil el gobierno de Vargas reemplazó efectivamente a una república oligárquica, en México ésta ya había sido dejada atrás hacia unas décadas como resultado de la RevoluciónMexicana. En Argentina Ansaldi considera que el golpe de Estado de 1930 y el posterior advenimiento de Perón pueden verse como una crisis de la transición democrática comenzada a principios del siglo XX.
Uno de los debates más importantes acerca del populismo giró en torno a la autonomía-heteronomía de las clases subalternas (principales apoyos de estos gobiernos), en relación con el líder, elpartido y el Estado. Los planteos tradicionales, como el que toma Ansaldi de Francisco Weffort, los caracterizan como sistemas con una estructura institucional autoritaria y semicorporativa, una orientación política de tendencia nacionalista, antiliberal, antioligárquica e industrialista y una composición social policlasista, pero que cuenta con el apoyo mayoritario de las clases populares. A suvez, plantean que en ese apoyo la clase obrera pierde su autonomía. Weffort analiza el caso del populismo brasileño desde esta perspectiva . Considera que tras la caída de la república oligárquica existió una crisis de hegemonía en la cual la burguesía no supo asumir su papel rector de la sociedad, por lo tanto para el autor las clases dominantes se vieron obligadas a recurrir a intermediariospara poder establecer alianzas con los sectores populares urbanos. Surgió entonces el poder personal del Vargas. A partir de entonces comienza según él un período de democratización del Estado que, sin embargo, se apoyó en dos tipos de autoritarismo: el institucional de la dictadura de Vargas entre 1937 y 1945; y el paternalista de los líderes de masa, incluido el segundo gobierno de Vargas, en elperiodo democrático entre 1945 y 1964. Este último período es el que considera como realmente populista; resaltando en cambio los rasgos de continuidad del primer gobierno de Vargas. Los gobiernos populistas, establecieron para él una relación paternalista con las masas urbanas a través de ciertas concesiones materiales y jurídicas que, sin embargo, contuvieron un reconocimiento como ciudadanos asus integrantes. El autor considera que en esta relación se manipula a las clases populares y, aunque reconoce que estas ejercieron cierta presión, cree que la misma estuvo limitada por su falta de organización autónoma, que era vedada por el líder y el Estado con el objetivo de contener la protesta social. Arnaldo Córdova se inscribe dentro de esta postura para analizar el movimiento cardenista...