Predicación del evangelio en las indias de josé de acosta

Estudio del texto

El jesuita José de Acosta señala en el capítulo séptimo de la Predicación del evangelio en las Indias de 1577 el problema delcontacto entre los indios y los “ministros del evangelio” (l2) en la tarea de evangelización. La dificultad parece radicar en las diferencias de costumbres ynaturaleza de unos y otros. Si bien Acosta reconoce en los indios un carácter humano: “los que en realidad son hombres” l 8, rápidamente asume una visiónextendida en la época que veía en los indios a unos seres de “costumbres bestiales”. La asimilación de los indios con los “bárbaros” y con “jumentos” a través dela referencia a la Antigüedad y a las Santas Escrituras le proporcionan al jesuita argumentos de peso para fundar su postura. Afirma Acosta al respecto quela educación en la fe es el camino que salva a todos los seres “no hay bárbaros sin sentido suficiente para la fe” l 38, racionales e irracionales y que eldeber de los ministros de la palabra es adaptar sus técnicas al público en cuestión: esto es echando mano al trabajo y al miedo como pilares de lainstrucción cristiana. La educación se presenta entonces como la única posibilidad de sustraerlos de un estado cercano al de la brutalidad. El deber de los educadoreses el de guiar a los indios con paciencia y caridad, imitando a Cristo. En resumidas cuentas, el jesuita critica por un lado a los que condenan a los indiosy no los consideran dignos de salvación y por otro, justifica una especie de gradación intermedia de la condición de los indios entre humanos y animales.