Principio de Mínima Intervención Penal

Universidad Nacional de Cuyo
Facultad de derecho
Área de Orientación Seminarizada de:
Derecho Penal




“EL CASTIGO”

Principio de Mínima Intervención Penal en el Estado Moderno












Cretton M.
Dirigido por: Prof. Dr. Godoy Lemos
UNCuyo 2012
Contenido
INDICE GENERALBibliografía.………………………………………………………………………………………...30
















"A menudo no es la comisión de un delito el obstáculo real para la reinserción del infractor, sino el hecho de haber padecido una pena."
Antonio Pablo García de Molina




















INTRODUCCIÓN

Se transforma en nefasta la idea de concebir un estado totalmente intervencionistade la mano de un derecho penal tan regulador que transformaría en un totalitarismo insostenible a cualquier gobierno. Bien sabemos que ningún extremo es bueno y por ende, la idea de la futura desaparición del derecho penal de la mano del fanatismo por la “intervención mínima” es igual de nefasta.
En la opinión de Carlos Blanco Lozano, profesor titular de Derecho Penal en la Universidad de Sevilla;“el derecho penal no interviene de cara a la regulación de todos los comportamientos del hombre en sociedad, sino sólo en orden a evitar los atentados más graves que se dirijan contra importantes bienes jurídicos”.
Si hablamos de aquella facultad que Blanco Lozano atribuye al estado, maneja entre líneas y entiende como ultima ratio, debemos también hablar y preguntarnos: ¿Dónde surgió el derechopenal? ¿Por qué existe? Y sobre todo ¿Qué lo sustenta? Para luego poder hablar de una parte de aquel, a la cual éste trabajo hace referencia. El control estatal sobre la vida de los hombres a los cuales se gobierna hoy en un estado moderno, no es más que una investidura transitoria de un poder concebido en base a una forma de gobierno determinada por la transigencia de hombres en el camino de lasupervivencia y evolución natural de aquello que no es más que nuestra propia esencia como seres sociables, que no es más que aquello que comúnmente llamamos estado y que no es más que el resultado del devenir histórico de los últimos siglos.
El derecho penal no es otra cosa que la mano fuerte que posee ese estado a la hora de proteger bienes jurídicos. Esto ya lo sabemos, pero nuestros ojosdeben buscar otro objetivo pues las verdades, en principio inamovibles, solo nos servirán como punto de partida para encontrar aquello que aun no podemos transformar en universal.
El Dr. Bustos Ramírez nos enseña que; “la intervención penal del Estado sólo está justificada en la medida que resulta necesaria para la mantención de su organización política dentro de una concepción hegemónicademocrática. Todo lo que va más allá de tal medida lo encauza por la vía autoritaria, que termina inevitablemente en la supresión de las bases democráticas del Estado”1.
La pregunta que guiará este trabajo será: ¿Qué es la intervención mínima?, ¿Es acaso la “intervención mínima” un camino hacia la erradicación del derecho penal, o es sólo un poco mas de agua en un café bien cargado? ¿Somos nosotros comociudadanos los encargados de tal transformación, o los legisladores? ¿Qué hay que cambiar: mentalidades, o códigos? ¿Si los legisladores también son ciudadanos, no se encuentran ellos envestidos de la misma diversidad de criterios que nosotros? La verdad es que todo depende del observador. Si vemos a “la intervención mínima” como un criterio de política criminal, un principio universal, una formade graduar la pena durante el proceso, etc. Las opiniones podrían variar al respecto. Por consiguiente, la pregunta a continuación podría ser: ¿Qué es lo que hace falta? La creación magistral de una tesis merecedora de un premio o el nacimiento de algo que en España gustan en llamar “Dogma”, una verdadera convicción de que el derecho penal debe ser...