Prueba Texto Narrativo

PRUEBA DE LENGUAJE Y COMUNICACIÓN
UNIDAD N° 1

Nombre: ________________________________ Curso: ____ Fecha: _________

I) Lee el siguiente texto con mucha atención. Puedes subrayar la información que te parezca relevante.

Lo quiso el destino

–Queridos hermanos –dijo el cura con voz pausada y serena. Y continuó: –Nos hemos reunido hoy, en la casa del Señor, para celebrar elsanto matrimonio de Camilo...

Cuando Camilo sintió su nombre, un extraño escozor recorrió su cuerpo.

–¡Camilo! ¡Camilo! Levántate. Llegarás tarde al partido. Escuchó que su madre le dijo con una voz estridente que lo sacó del sueño.

Ese domingo en la mañana, en el entretiempo, mientras descansaba en un costado de la cancha, una niña que pedaleaba por allí en bicicletallamó su atención. Nunca la había visto. Súbitamente algo extraño lo impulsó a seguirla. Sin saber por qué, como hechizado, se alejó de la cancha de juego y caminó detrás de ella; alcanzó a ver que doblaba en una esquina y hacia allá dirigió sus pasos con el corazón latiendo en su pecho más aprisa que lo normal.

Cuando dobló la esquina vio que la niña –unos metros más allá– perdía elequilibrio y caía aparatosamente al suelo. Instintivamente, Camilo corrió hasta ella, le tendió su mano y la ayudó a levantarse. Cuando ella levantó la cabeza sus miradas se cruzaron... algo extraño y misterioso había en sus pupilas, algo indefinible con palabras, pero esa mirada caló hondo en su alma.

La niña una vez repuesta, mirando a Camilo le dijo que su nombre era Viviana; le agradeció laayuda, levantó su bicicleta y se alejó con rumbo desconocido. Camilo, sin pestañear y muy confundido, vio alejarse a esa niña desconocida que tenía una mirada especial, una sonrisa especial, un perfume especial...

Esa noche fue una noche diferente a todas las otras noches. Entre sueños vio a Viviana. Vio sus ojos muy cerca de los suyos. Sintió su perfume penetrante y se estremeció.

Esmás, sintió su piel cerca de la suya, una piel tersa, como si fuese de algodón o seda. Cuando despertó sintió angustia, pues la niña había desaparecido y él no sabía si la volvería a ver. Ese pensamiento empezó a atormentarlo y en silencio comenzaba a sufrir con esa jugarreta del destino.

Siete días después de aquel fortuito encuentro, por primera vez Camilo fue a comprar a una panadería nuevadel barrio, a pocas cuadras de su casa. Al ingresar a aquel negocio su sorpresa fue mayúscula, no podía dar crédito a lo que sus ojos veían y su corazón se aceleró como nunca antes y parecía que se le iba a salir del pecho. Frente a él estaba la guapísima Viviana.

Lentamente avanzó hacia ella y sacando una voz apenas audible la saludó. Ella, sorprendida, respondió el saludo con timidez ysorpresa. De pronto apareció un enorme hombre de bigote negro, algo serio y atlético, que se dirigió a la niña:
–¿Pasa algo, Vivianita? ¿Algún problema?

La niña, algo turbada, respondió:

–Papá, este es el joven del que te hablé, él me ayudo el día que me caí en la bici.

El hombre, cambiando de expresión, con una leve sonrisa le tendió la mano y le dio las gracias por sugesto.

Esa mañana Camilo se marchó muy confundido, con un sentimiento que oscilaba entre la confusión y la extrañeza. Desconcertado era la palabra exacta para describir su estado anímico. Esa mañana no quiso ir con sus amigos a jugar fútbol. Se fue a una plaza cercana, quería estar solo, pensar en todo lo que había sucedido, ordenar sus pensamientos.

Esa tarde, cuando el sol comenzabaa esconderse, Camilo fue nuevamente a la plaza. Buscaba la soledad. Algo extraño sucedía en su interior. Algo que nunca antes había experimentado y no sabía qué era. Cuando jugaba con un trébol de cuatro hojas entre los dedos vio que Viviana detuvo su bicicleta frente a él y sonriéndole alegremente lo saludó con un beso en la mejilla.

En aquel instante Camilo se sintió el ser más dichoso...