Símbolo y alegoría en el bosco

Elena García de la Calle

símbolo y alegoría en el bosco | 12 de diciembre de 2009 |

El autor de este ensayo es el andaluz Carlos Castilla del Pino (1922-2009), reconocido neurólogo, psiquiatra y escritor. Además de tenaz humanista y dueño de un brillante estilo propio, Castilla del Pino es una gran figura de nuestras letras y de nuestro pensamiento. Dedicó su vida alconocimiento, a la búsqueda de respuestas sobre lo más oscuro de la existencia humana, y también a la enseñanza, esforzándose por no parecer demasiado técnico sino cercano y claro para que esa conciencia llegara a todos aquellos que se acercaban a sus textos sin renunciar a la profundidad de la cultura. El doctor dejó sobrada constancia de que la literatura y la psicología son mucho más que disciplinaslejanas la una de la otra, que son el dorso de una trama de claros y oscuros llamada Humanidad.
Desde el principio queda determinado el enfoque del análisis: el de la representación en la pintura de El Bosco, más concretamente en el cuadro titulado Mesa de los pecados capitales, de un realismo impecable, pintado en 1485 y que a día de hoy se encuentra en el Museo del Prado. Nos introduce la idea deque toda obra de arte tiene una estructura narrativa, que cada cuadro es un discurso representado, y también nos habla de la paradoja que rodea toda la producción del pintor holandés: ese punto de indescifrable que posee, partiendo de la base de que la misión de las creaciones artísticas es el entendimiento del que las observa. El Dr. Castilla del Pino trata de exponer los elementos que determinanesa inaccesibilidad en la obra de El Bosco en general, mediante una sugestiva tesis de los conceptos de símbolo y alegoría. En ella se establecen sus diferencias pues son dos ideas que frecuentemente se confunden y entremezclan, y es necesario detenerse en este punto del artículo y hacer una lectura más lenta y concienzuda para captar el alcance del tema. Nos encontramos en diferentes niveles: enel caso del símbolo, en el de lo visible, lo palpable, lo evidente, y, en el caso de la alegoría, en el de lo hipotético, lo oculto. El símbolo tiene una naturaleza colectiva, pues su fin es ser entendido por la sociedad. Su significado es estático y esta inmovilidad le da un carácter de claridad y comprensión, forma parte del universo de la imaginación colectiva. La alegoría, en cambio, es deíndole individual, pertenece al territorio personal de la fantasía, que es un grado superior
de imaginación, es “ir más allá”. Por eso los símbolos son descifrables y las alegorías no, porque éstas provienen del mundo interior y personal del que las crea, y al que no tenemos acceso. Cada artista aporta un carácter, un toque personal, a los símbolos que utiliza. En la creación de El Bosco hay quesubrayar lo alegórico como muestra de su mundo introspectivo, donde la fantasía fluye libremente y se convierte en onirismo, en sueños, en capricho. Un mundo particular e íntimo que sustituye al real, que no obedece a ninguna ley y que, por tanto, no es inteligible. Nuestra mente vuela para llegar a una interpretación, más o menos acertada. Y digo “más o menos” porque la apreciación personal tienemucho de interna y de subjetiva, hecho que nos somete continuamente a este misterio, este secreto, que es la intencionalidad (la realidad) del artista.

En la Alta Edad Media se produce un estallido de alegorías, a diferencia de etapas posteriores. Es indispensable en la interpretación de la obra Mesa de los pecados capitales el conocimiento de la época, pues en este ámbito es donde la pintura deEl Bosco se expande y su alegoría cumple una función claramente pedagógica, enseñándonos la diferencia entre el bien y el mal, entre el pecado y la virtud. Mediante la alegoría nos muestra lo que se debe y no se debe hacer en forma de catarsis, buscando impresionarnos y sobrecogernos para que la lección quede bien aprendida, para que el espectador no se quede indiferente, y esto marca su otra...