Tengo Que Decir Algo Al Respecto Sebasti N Peredo IV A 2013
encontramos que hay algo que no está del todo bien en cualquier situación. Y por muchos motivos
que pueden o no ser los adecuados muchas veces callamos, y la frase se esfuma…
Hoy, yo tengo algo que decir al respecto. ¿Al respecto de qué? Pues de varias cosas, pero a raíz de algo en particular. Hoy mientras toda mi generación, a la cual le tengo un cariño enorme, se
encuentra en la misa de despedida que realiza el Colegio Teresiano Enrique de Ossó; yo escribo
estas palabras. No pienso hacerme el mártir ni nada por el estilo, eso se lo dejo a otros. Pero si pienso que uno de ustedes leerá esto y encontrará sentido en lo que digo.
Esta tarde, a eso de las 20:00 horas, fui expulsado del establecimiento. Tuve que dejar a mis
compañeros y abandonar el colegio junto a mi madre. ¿La razón? Pues al parecer mi presentación
personal no fue la adecuada para la categoría del evento. Vestido de uniforme tal como lo señala el
reglamento del estudiante (Sépase polera amarilla, pantalón gris, calzado negro, etc…) el único
problema fue que me presente sin afeitar. Cuestión que fue causal suficiente para que se me pidiera
desalojar el resiento, donde se llevaría a cabo una misa en honor a los estudiantes egresados de
cuarto medio. Debo admitir que escribo con cierta perturbación, pero no es rabia ni enojo lo que
siento, sino lástima. Una profunda lástima por las personas que son los responsables de este
suceso. Y estas personas no son ni más ni menos, que nosotros mismos. Estudiantes teresianos,
nuestro colegio como institución se llena la boca de palabras sin sentido, vacías y efímeras. En las
aulas nos enseñaron nuestros profesores, a quienes respeto mucho, a defender nuestros derechos y
velar por que cada persona es igual a la otra y nace con la misma dignidad. Hoy yo me sentí
profundamente discriminado por mi forma de ser, y mi manera de pensar. Discriminado por la misma
institución cuyo discurso es la tolerancia y el respeto mutuo y basa su enseñanza en los llamados
“valores teresianos” ¿Quién dice que una persona es mejor o peor por presentarse sin barba a una
ceremonia? ¿A quién rayos se le podría ocurrir semejante ridiculez? Y es que esto no solo sucede
en el Colegio Teresiano, sino que se extrapola a toda nuestra sociedad. ¿Sabe más sobre la vida
quien mejor se ve? Me da rabia que dejemos que la frivolidad se tome nuestra cultura y nuestro
modo de convivir. Dejemos un rato las maneras arcaicas de pensar, pues somos jóvenes y esa es
nuestra misión, no otra.
Mi colegio condena como una falta grave y constitutiva de maltrato escolar cualquier conducta
de discriminación bajo cualquier circunstancia (revísese el reglamento escolar, punto 3.4.4) y
tampoco estipula como una falta a dicho reglamento el que los varones se presenten sin rasurar al
establecimiento (revísese el reglamento escolar, punto 5 en adelante) ¿Por qué entonces fui
expulsado hoy? La respuesta es tan ridícula como la pregunta, y es que lamentablemente en este
mundo y en esta sociedad los prejuicios son la norma, y la violencia el estandarte. Considero grave este hecho y quien no lo considere así es porque no ve las implicaciones que aquí expongo.
No se trata simplemente de un estudiante haciendo un escándalo por mínima cosa. Se trata de
un estudiante que por más de doce años ha visto como la irracionalidad y el abuso de poder se
toman las instituciones que se supone, están para enseñar lo contrario. Desde las más altas esferas
de poder del colegio la ...
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