Titular perfecto

ZONA URBANA La proeza del titular perfecto
Por Javier Darío Restrepo Defensor del lector A comienzos de octubre don Juan de la Cruz Ocampo se quejó: "hay títulos que parecen adivinanzas". Alfinalizar el mes, hay otras dos quejas sobre mi escritorio: la de don Juan Pablo Restrepo, que critica ácidamente titulares de primera página y la de don Alberto González M. que encontró un divorcio dañinopara la Universidad de Antioquia entre el titular y el texto de un artículo sobre las averiguaciones de la contraloría en las bodegas de la Universidad. Son tres casos planteados alrededor del mismotema: los titulares, que cuando son buenos, nadie los nota y cuando fallan, afean como un grano en un bello rostro de mujer. La primera página es, al fin y al cabo, la cara del periódico. Los periódicoscuidan esa cara y extreman las precauciones con esos rasgos que son, entre otros, los titulares. Para El Comercio, de Lima los titulares son "la más importante vía para ingresar a la información". ElPaís, de Madrid, los relaciona con sus mejores noticias porque "una buena información es la que se resuelve con un título corto", y EL COLOMBIANO considera que los títulos deben hablar por sí solos,con claridad no exenta de gracia cuando se dan las condiciones, como las que permitieron aquél titulo inolvidable: "Caen cacos con coca en cocos". Para titular bien no bastan los talentos de un buenescritor. En la historia del periodismo figura aquel 13 de enero de 1898 en que, sobre la mesa de trabajo del director de L´Aurore, de París, Ernest Vaughan se desplegaban las cuartillas escritas porEmile Zolá sobre el proceso Dreyfus. El respetado escritor había propuesto el título: "Carta al señor Félix Fauré, Presidente de la República". Fluctuando entre el respeto al escritor y su instinto deperiodista, Vaughan encontró una ayuda inesperada cuando Georges Clemenceau, editorialista y veterano hombre de prensa, puso el título en rojo: "J´acuse" (Yo acuso) uno de los titulares más...