Titulo A

que la noche de domingo de carnaval, me encontraba con unas amigas tomando en el mirador a la orilla de la playa y ya por tanta cerveza que había tomado, me empezaron a dar muchas ganas de hacer pipí, por lo que aprovechando que era fiesta y que todo mundo hace pipí donde puede, decidí separarme de mis amigas e irme hacia atrás de unas dunas de arena que había ahí en la playa, para hacerlo.Observé a mi alrededor y vi que no había nada, entonces me dispuse a bajarme la tanga que traía puesta y me levanté la fada para agacharme. Estaba orinando cuando vi una sombra que me hizo voltear asustada y vi que era un chavo que estaba orinando también, eso me dio pena pero bueno, no era algo de que espantarse pues él solo había hecho lo mismo que yo, era lógico que hubiera gente con las mismasganas que yo y seguí en lo mío.

La verdad, me dio morbo ver como orinaba un hombre y volteé a verlo, cosa que nunca hubiera hecho si no me hubiese encontrado tan borracha como estaba en esa ocasión y lo vi y él se me quedó mirando y se dio cuenta que lo estaba mirando. Así, con su verga grande y gorda de fuera, él se paró junto a donde yo estaba agachada y se la empezó a sacudir, preguntándome“¿qué nunca has visto a un hombre orinar?”, entonces me entraron nervios y solo atiné a mover la cabeza en forma negativa.

Al momento, él me dijo “pues ya viste uno” y se me quedaba mirando, no me quitaba los ojos de encima, entonces yo lo cuestioné también “¿qué tú nunca has visto a una mujer mear o qué?”, con la intención de que él se fuera y me pudiera parar, pues ya había terminado de hacerpipí. Él solo atinó a decirme “no, nunca y tú te ves muy linda”, entonces se agachó por atrás de mí para verme, ya más de cerca o ver algo más.

En eso, sentí sus manos acariciándome mis nalgas, me quedé paralizada y le dije “ya deja, vete o les voy a gritar a mis amigos”, él se empezó a reír sin quitarme las manos de mis nalgas y acariciándome mi culo y mi papayita, lo que empezó a excitarme,pues me encontraba tomada y el chico no era de mal ver. Así pues, yo empecé a excitarme pero le decía “ya vete, suéltame o vas a ver” y él solo se reía; de pronto y para que no me siguiera manoseando, me levanté pero cuando lo hice y quise subirme la tanga, él me la jaló y me la arrancó de las piernas.

La verdad, eso me dio miedo y lo aventé pero él me tomó del brazo, me jaló hacia él y meempezó a besar, a lo que yo me resistía, pues tenía una sensación de miedo y de excitación, ya que ese hombre no dejaba de besarme y de acariciarme las nalgas y la vagina. En un momento dado, él dejó de tocarme las nalgas y puso su mano en mi espalda, alejándose un poco de mi boca y me dijo “me gustas mucho” y me volvió a plantar otro beso pero sin manosearme.

Eso lo hico rico y yo le correspondíese y después fueron no sé cuántos hasta que él se alejó de nuevo y me preguntó mi nombre y mi edad. Yo le contesté y le pregunté lo mismo, luego salimos caminando como amigos de atrás de las dunas, él llevando mi tanga en su mano, la que se guardó en el pantalón y me dijo “la voy a guardar de recuerdo de la meoncita más bonita de carnaval” y se empezó a reír.

A continuación, yo le pregunté conquién iba, me respondió que ya se había quedado pues sus amigos se habían ido y lo dejaron porque no quería ir a un table dance a donde ellos iban a ir, así que había decidido bajarse a la playa, a caminar, a disfrutar de la noche y a ver qué niña linda veía y me encontró a mí. Por mi parte, yo le platiqué que iba con unas amigas, que lo invitaba a juntarse con nosotras pero que no dijera que loacababa de conocer y en qué forma, si no que diría que era un amigo y ya nos fuimos juntos, a sentar en el cofre del coche de mis amigas.

Un poco más tarde, fuimos por más cervezas y cuando regresamos, nos estacionamos más adentro, pues ya habían ocupado el lugar donde habíamos estado antes, enseguida mis amigas se bajaron y él y yo seguimos platicando y tomando adentro del coche. Ya con...