trabajo
A partir de la década del 60 América Latina comienza a vivir un período de auge y caída del modelo de universidad pública, autónoma y gratuita desarrollado durante las décadas anteriores.
En un primer momento, en buena parte de la región durante los años 50 y 60, las transformaciones derivadas del desarrollo socio-económico que se inició apartir de los años 40, los procesos de urbanización, la adopción del modelo de sustitución de importaciones, los procesos de industrialización más o menos desarrollados según los países impactaron significativamente la expansión y el crecimiento de la universidad pública. El mejoramiento de los ingresos reales de sectores urbanos, y la creciente aceptación por las generaciones jóvenes de larelación entre grado de educación y oportunidades económicas y sociales, favorecieron la ampliación significativa del acceso de diversas capas de la sociedad a las universidades, potenciando la emergencia de sectores medios.
Por otra parte, se hace cada vez más visible la emergencia de una conciencia revolucionaria, animada por el pensamiento progresista en la región, por la irrupción de lospostulados emancipadores de la Revolución Cubana y por las desigualdades sociales propias del capitalismo dependiente, que singulariza los procesos de reforma universitaria y “logra aglutinar en un primer momento sectores modernizantes, democráticos y revolucionarios a pesar de que en el fondo sus intereses y proyectos de transformación institucional difieran considerablemente como quedó demostradoaños más tarde”. (Vasconi y Recca, 1978:56)
La fuerza institucional alcanzada y la coyuntura política del momento, se amalgaman para darle paso a un significativo grupo de intelectuales académicos que se radicalizan y que, en unión de sectores populares, promueven intensos debates ideológicos y generan iniciativas culturales y políticas que enfrenta tenazmente a los Estados en procura de unaopción anticapitalista de desarrollo nacional. Las represiones no se hicieron esperar y se producen intervenciones y masacres, como la de México en 1968. La derrota de este interesante movimiento trae consigo el inicio de un proceso de modernización estructural y funcional de corte tecnocrático que va modificando los aspectos más tradicionales de la institución durante la década del 70.Progresivamente, el sector modernizante fue ganando terreno y logra imponer ajustes al modelo universitario, en concordancia con las nuevas exigencias del desarrollo capitalista dependiente. Estos se expresan en la necesidad de proveer al sistema de un grupo reducido y selecto de recursos humanos de alta calificación, generar un cambio en la formación en cuanto tipo de conocimientos, aptitudesdestrezas y promover la adopción de concepciones ahistóricas y supuestamente universalmente neutrales en el comportamiento científico; lo cual exige reconsiderar los recursos humanos, físicos y financieros en términos de mayor eficiencia, imponer sistemas de admisión, selección y evaluación cada vez más rigurosos e injustos; y contribuye, por mecanismos que van más allá de la formación, a lainternalización de valores, imágenes, intereses y pautas de consumo que se hallan funcionalmente asociadas a los requerimientos capitalitas foráneos. (obcit)
Un proceso de modernización de esta índole en países capitalistas dependientes con una elevada inequidad social, educativa y cultural, significa que la actuación de la universidad en el contexto de la sociedad global acrecienta la brecha existente,contradice su función cultural y social y las aspiraciones de desarrollo nacional, y acentúa la condición de dependencia al reproducir y difundir conocimientos vinculados a los centros de poder y no al desarrollo humano. De esta manera, a partir de la década de los 70 se inicia el cierre de un proceso que apuntaba a colocar la universidad al servicio de las necesidades de las grandes mayorías,...
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