Trafico De Personas
Los niños, niñas y adolescentes no escapan a esta realidad. La familia sumida en la pobreza busca mejores horizontes para sus hijos e hijas, con la falsa creencia de que en otros países van a vivir mejor aunque estén alejados de su familia de origen, pero como no pueden migrar de manera legal debido a susituación de pobreza, recurren a la migración ilegal y al tráfico.
Conocer el número de personas menores de edad traficadas no resulta fácil, debido a que es difícil identificarlas, a la ausencia de registros e indicadores, a la falta de procesos judiciales sobre el tema, y a la falta de denuncias y reportes sobre este tipo de delitos.
En República Dominicana, y con la finalidad de hacer unacercamiento a esta situación, UNICEF-Santo Domingo ha apoyado la realización de dos estudios sobre tráfico de niños, niñas y adolescentes. El primero fue la evaluación rápida “Tráfico de Niños Haitianos hacia República Dominicana” (UNICEF-OIM, 2002), apoyado conjuntamente con la Oficina Internacional de las Migraciones, y el segundo fue la investigación de mayor profundidad “El tráfico de niños,niñas y adolescentes desde Haití hacia la República Dominicana” (UNICEF, 2004).
Ambos estudios señalan la existencia de un conjunto de factores no sólo socio-económicos, sino también políticos, culturales y legales en los dos países que condicionan el tráfico, tales como: la crisis económica, la pobreza; algunas prácticas culturales y tradicionales irrespetuosas de los derechos de la niñez (el“restavèk”, por ejemplo), complicidades de las autoridades fronterizas de ambos países y la demanda de la mano de obra de menores de edad, entre otros.
Asimismo, revelan que los traficantes de nacionalidad haitiana y dominicana, operan impunemente a lo largo de la frontera, operando como redes extensas, que aprovechan se de las condiciones de pobreza de familias haitianas y/o engañan a los padres ylas madres para llevar a sus hijos e hijas menores a ser explotados/as en el trabajo agrícola y sexual comercial, la servidumbre doméstica, la mendicidad y la venta callejera.
La situación que viven los niños y niñas que entran al país de manera ilegal o que son traficados se evidencia en el estudio del 2004. Un 38% de los 784 encuestados/as (dominicanos y haitianos) laboraban sobre todo en elsector agropecuario, como empleados/as en casas de familias y en otras actividades informales (ventas callejeras). Su jornada de trabajo no era distinta a la de un adulto, ya que trabajaban de seis (6) a siete (7) días a la semana porque “necesitan alimentarse”.
Este ritmo fuerte de trabajo tiene consecuencias sobre su desarrollo integral y concretamente sobre su asistencia escolar y suaprendizaje. De toda la población investigada, solamente la mitad de los y las que tienen cinco y más años frecuentaba la escuela y el resto no lo hacía por muchas razones: incompatibilidad del trabajo con la escuela, falta de acta de nacimiento
Los niños y niñas traficados, además de estar expuestos a la explotación, viven con sentimientos de abandono, ausencia de referencias claras de familia, altiempo que sufren experiencias de discriminación, rechazo y abuso; lo que tiene impacto fuerte sobre su vida afectiva y emocional y marcará sus relaciones sociales en el futuro.
Haití y República Dominicana, como Estados partes de la Convención sobre los Derechos del Niño y en cumplimiento de la misma deben tomar medidas de carácter nacional, bilateral y multilateral para impedir el secuestro, la...
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