Una lectora nada común

Jorge Andrés Gómez Valdez
Máster de Escritura Creativa
2013-2014
Universidad Complutense de Madrid.

“Mi reino por un libro”, a propósito de Una

lectora nada común.

“No pones la vida enlos libros. La encuentras en ellos.”
(Allan Bennet)

Un día, la reina descubre gracias a las travesuras de sus perros, la biblioteca
móvil del ayuntamiento. Al encontrarse allí, decide tomar unlibro. Desde
entonces, y casi de manera inconsciente, su Majestad se apasiona
compulsivamente por la lectura y conoce más de lo que hubiera imaginado.
Por ejemplo a Norman el joven pelirrojo ayudantede cocina, con una curiosa
tendencia por escritores gay y que de repente se convierte en su asesor
literario o al señor Hutchings, conductor y bibliotecario quien le facilitará el
acceso a unaecléctica colección de libros. Pero ¿cómo se encamina el gusto
literario de la soberana de Inglaterra? Alan Bennet, irónico y provocador, se
aventura a sugerirnos lo que podría suceder si Isabel II leyesea Ivy ComptonBurnett, Proust, Jane Austen, Henry James, Virgina Woolf, Dickens, George
Eliot, Dostoievsky, Shakespeare, Balzac o Genet y además comenzara a
discutir sus experiencias y opiniones enreuniones con delegados,
embajadores, ministros y miembros del senado. Más aún ¿qué sucedería si esta
fiebre de lectura comenzara a invadir sus deberes reales?
La mujer más importante de GranBretaña estaba ocupada en asuntos de
Estado, su mundo se limitaba a soporíferas ceremonias, inauguraciones y
cenas de gala, encapsulados todos en rígidos protocolos y pomposos actos.
Pero se opera elcambio y la reina observa como su léxico crece, comienza a
interrogarse a sí misma y a todo aquel que ve sobre qué tipos de lectura

prefieren sus súbditos, toma notas de sus pensamientos yreflexiones, desafía a
los autores e incluso se plantea un nuevo hobby que le revela una inseguridad
hasta entonces desconocida. ¿Qué le pasa a la reina?
Sátira salpicada de humor agudo y parodia...