Una Señal

Antes del primer café matutino.


Antes de tomar el primer sorbo de su café matutino, fue como si toda su vida le hubiese pasado por la mente como una ráfaga eterna.

-¡Mataré al primer esposo que tenga!-dijo de pronto.
-¡Estás loca!-dijo su amiga sin sorprenderse demasiado, estaba acostumbrada a escucharla decir cosas fuera de eje.
-¡Loco Munch!, y mira la controversia que todavíaocasiona su obra-le contestó sin desespero.
¿Quién es ese?-pregunta su amiga, pensando si tenía que ver algo con la conversación.
Celeste suspira -Olvídalo… Vamos por empanadas de pollo-dijo resignada.

Al acabar la jornada escolar se separó de su amiga para tomar rumbo a sus casas. Celeste sabía que el origen de su pensamiento repentino y expresado hacia su amiga era defensa. Sabía que algo lepasaría si no llevaba a cabo su plan, sin saber quien fuese la víctima.

Parpadeó tres veces, y se dio cuenta de la realidad, de su presente. Bajó el tazón de café a una mesa cercana, y se recostó en el mesón y suspiró.

Alan la traía loca. Lo conoció con una camiseta de Aerosmith mientras cantaba en una banda de rock alternativo, nunca se olvidarían de aquella fecha. Sus profundos ojos colormiel, le expresaban todo lo que podía sentir, y con sólo mirarla ella sabía lo que podría pasar. Quizás es lo que más le encantaba a ella. O era su tez trigueña con un tono canela pasión que combinaba con su cabello y ojos, o tal vez su poesía encantadora. Pero el tenía un carácter extraño, que a pesar de que Celeste sospechase lo que pasara, su actitud terminaba por confundirla. El la amabalocamente, le encantaba su tierna actitud, su manera de ser con él, la forma en que caía su cabello sobre su espalda. Desde que la vio él no quería ser sólo su amigo, pero no se lo demostró hasta tiempo después.

Celeste se acordó de ello, estaba como en hipnosis. Recuerdos casuales seguían viniendo a su mente. Puso su mano en la frente.

Recordó su primer beso con él, tiempo después de haberseennoviado. Lo que sintió, el lugar, el cómo estaba vestida, la magia y conexión, ambiente, clima.

Sintió como una lágrima rodó por su mejilla, miró el tazón de café, rodó una silla y se sentó.

Recordó su hermoso vestido blanco, el peinado que tenía. Se estaba preparando para su boda. Sería en pocas horas. Recordó el traje negro de Alan, aunque no contrastaba mucho con su piel, se veíahermoso. Aunque ambos tenían pensamientos agnósticos, se casaron en una iglesia. Había mucha gente y hacía calor. Al terminar la ceremonia todos los felicitaron.

Se encontró con las manos puestas en su cara, le daba miedo su ser. Se tenía miedo a sí misma. Quizás fue el último recuerdo que vino a su cabeza esa mañana.

Se levantó de la cama, bostezó. Hizo una serie de estiramientos y decidió ir atomar una ducha. Pensaba mientras el agua fría caía en su espalda. Terminó y se vistió. Decidió ir a la cocina y preparar su desayuno. Vio el veneno de ratas y lo escondió en el último cajón. Empezó a preparar el café. Alan se había despertado. Buenos días amor- le dijo al salir hacia la cocina. Buenos días- respondió ella, mientras apagaba la cafetera. Alan se dirigió al comedor a esperar eldesayuno. Ella odiaba eso, ¿Por qué tenía ella que levantarse y hacer un desayuno? Y ahí se venía su monólogo del machismo, la sociedad, etc. Esto aumentó su pensamiento psicópata.

Celeste se vio en el presente, sólo eso había pasado, y ahora se encontraba en esa silla sentada, al frente de la taza. Tomó la taza de café y se paró.

Vertió el líquido en la taza de café, no pensó más. Llevaría acabo su plan. Sirvió otra taza de café y la puso en el mesón. Salió al comedor y ahí estaba él, esperando la taza del café matutino. ¿Qué pasa?- Le pregunto el al verla semi agitada. Nada, ya traigo tu café-y se dirigió a la cocina. Espera-le dijo el-primero tomaré una ducha, después me sirves-dijo parándose y le dio un beso en la mejilla. Sintió quebrarse. Vio como Alan se alejaba hacia la...